La Asociación de Apicultores de Guadalajara se ha sumado a las peticiones de los ganaderos afectados por la sequía a nivel regional y quieren que desde la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y desde el Gobierno central se pongan las medidas que sean precisas para paliar sus efectos si se tiene en cuenta que la cosecha de miel de este verano en la provincia se ha visto mermada en un 60 por ciento.
El presidente de la Asociación de Apicultores de Guadalajara, Ángel Marco, ha señalado que la sequía de los últimos meses ha afectado de manera importante a la producción de miel, y si a eso se le suma que la crisis de los precios en el sector, que “están por los suelos”, se traduce en un año “bastante duro”.
Según Marco, se compra cada vez menos miel en España y los precios de venta han decrecido mucho, ha afirmado convencido de que desde España se debería de luchar más en defensa del sector, con referencia no solo a este producto a nivel general sino a la propia Denominación de Origen 'Miel de la Alcarria'.
Marco cree que habría que trabajar en una labor de concienciación que acerque más este producto a la población y aunque ha indicado que ya han empezado ya a dar charlas en los colegios, se ha mostrado disgustado por todos los problemas que registran pese a reconocer que en el caso de la Denominación de Origen 'Miel de la Alcarria' son menores porque no hay mucha para vender.
Desde la asociación han firmado un convenio con Ibercaja para acercar este producto a los colegios y que los más pequeños empiecen a conocerlo, una labor en la que quieren continuar para que las nuevas generaciones perciban sus “múltiples” beneficios con distintos fines.
Creen que es de justicia poder acogerse a las medidas frente a la sequía solicitadas por los ganaderos como es la reducción de módulos, o en su caso, el adelanto de ayudas medioambientales, y eso es lo que han pedido a la organización agraria Asaja para que dé traslado a la Junta porque también se consideran trabajadores de explotaciones ganaderas.
De hecho, debido a la falta de polen por la sequía, han tenido que hacer uso de los abonos para alimentar a sus abejas porque “desde mayo a septiembre las lluvias han sido escasas, tienen que comer y no hay néctar ni polen en el campo” para mantener la cabaña y que no se muera de hambre, han indicado.
“No hay miel en ningún sitio”
Por su parte, Ángel López Herencia, representante del sector apícola en Asaja a nivel nacional y apicultor, ha asegurado que no hay miel en ningún sitio, algo que afecta no solo a la provincia alcarreña y a la región sino a toda España.
Según Herencia, este verano “prácticamente no hay miel en ningún sitio” y la que hay tiene un precio que es “muy inferior al de hace años”, ha lamentado el que fuera también presidente de esta asociación hasta hace unos años, tras reconocer que los canales de comercialización han comenzado a afectar y que cada vez se trae más miel de China, Argentina y otros países.
“Hasta en los lineales está bajando el precio de la miel”, ha indicado Herencia a la par que ha lamentado que los precios hayan decrecido hasta el 50 por ciento: “Algunos se las van a ver muy mal para pagar gastos”, ha aseverado.
“La gente busca la miel de calidad en pequeños comercios, apicultores, pero es la minoría porque para el gran consumo la miel está en las grandes superficies y si no estás ahí, no existes”, ha precisado.
Ha reconocido que el consumo de la miel de la Alcarria también ha descendido, pero sobre todo el resto de las mieles, en referencia a otras muchas que hay en la provincia.
En la provincia de Guadalajara el número de profesionales que se dedican en exclusividad a la agricultura es menor que en otros puntos de España y según Herencia aún cree que va a decrecer más.
A su juicio, hay que sacar miel con marcas al mercado y que el consumidor sepa lo que compra. “Hay que reorganizar el sector”, ha precisado tras indicar que parte de la culpa del problema que tienen viene de que se intentó hacer una interprofesional hace varios años que hubiera sido una buena forma de regular el mercado interior pero “se la cargo Coag”.
“El sector está pasando muy mal momento no solo por la sequía sino por la disminución en los ingresos”, ha apostillado una vez que ha apuntado que el pasado año hubo apicultores que no llegaron a vender el producto porque “nadie se lo compraba”.