El Gobierno de Castilla-La Mancha va a trabajar de la mano con el sector para relanzar la Interprofesional del Melón y la Sandía de la Comunidad Autónoma con el objetivo de que tenga “más atribuciones, más capacidad de tomar decisiones y que gestione la marca de calidad Indicación Geográfica ‘Melón de la Mancha’”.
El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, así lo ha manifestado esta mañana en Tomelloso (Ciudad Real), donde ha acudido a la Cooperativa ‘Santiago Apóstol’, referente en el sector del melón y la sandía en la región. Allí ha recalcado que se va a impulsar esta profesional “para que dé el servicio que los agricultores demandan”.
Acompañado por el presidente la de cooperativa, José Ángel Serrano; la alcaldesa de la localidad, Inmaculada Jiménez; la delegada de la Junta en la provincia, Carmen Olmedo; y la delegada provincial de Agricultura, Amparo Bremard, entre otros, el consejero ha comprobado ‘in situ’ el desarrollo de la campaña en la región, que se extenderá durante todo este mes de septiembre.
Como balance, Martínez Arroyo ha indicado a los medios de comunicación que esta campaña está siendo “muy positiva” para los agricultores gracias a varios factores. Entre ellos, ha recalcado la “unión del sector” con la Interprofesional que ha significado que se cuente con la posibilidad de tomar decisiones y es algo “que está empezando a calar”.
Este año, ha especificado, se ha sembrado menos que otros por decisión del propio sector, ya que “si se ofrece menos de lo que se demanda, los precios suben” y, por ello, se han obtenido precios altos.
30 millones de euros para el regadío de Peñarroya
El consejero ha señalado además la importancia del recurso del agua en una zona como esta donde es escasa y en la que se usa bien el recurso, de manera eficiente.
Así, ha recordado que muchas de las parcelas de los agricultores de las que sale el melón vienen de la zona regable del embalse de Peñarroya. En esta Comunidad de Regantes, ha dicho Martínez Arroyo, se están invirtiendo 30 millones para mejorar el que está considerado el regadío más importante de Castilla-La Mancha y gracias al que “tenemos cultivos sociales, como el del melón que generan empleo en el campo y en los pueblos”, ha finalizado.