Unión de Uniones de Castilla-La Mancha se ha dirigido por escrito al Presidente de la región Emiliano García-Page, para que la Junta se implique con diversas medidas y apoyo económico para socorrer a los agricultores y ganaderos cuyas explotaciones han resultado gravemente afectadas por los efectos del temporal de nieve y frío de estos días.
Entre las medidas que apuntan desde la organización piden que en el marco de la declaración de zona catastrófica para las zonas afectadas se movilicen medidas y recursos para auxiliar a los agricultores y ganaderos en este trance y que, particularmente, se pongan en marcha ayudas acogidas al régimen de mínimis para la recuperación de los olivares y las infraestructuras ganaderas destruidas.
Unión de Uniones de Castilla-La Mancha también solicita en su escrito que incluyan en el Programa de Desarrollo Rural de la región las ayudas para la reconstitución del potencial de producción agrícola dañado por desastres naturales y catástrofes que permite el Reglamento 1305/2013, teniendo en cuenta que el programa, además, recibirá aportaciones adicionales del Fondo Next Generation EU.
Según ha señalado Unión de Uniones, de momento las dificultades para acceder a las fincas hacen muy difícil una evaluación general de los daños, los gravísimos efectos provocados en el olivar son ya evidentes y no sólo arriesgan a dar por pérdida lo que quedaba de cosecha de la presente campaña, sino que muy posiblemente suponga la muerte de plantaciones enteras de olivos por el desgarramiento de los pies y las heladas. “Se trata de una pérdida de patrimonio agrícola que puede dejar sin ingresos o sin una parte sustancial de los mismos a miles de familias en nuestros pueblos”, han señalado.
A ello se suman los daños producidos en cultivos hortícolas de invierno y en las instalaciones ganaderas, que se acompañan de las dificultades para hacer llegar a los animales durante unos días alimento y agua por lo intransitable de los caminos.
Igualmente, los apicultores han resultado afectados ya que la nieve ha cubierto literalmente las colmenas y en muchos casos no han podido acceder para destaparlas, lo que amenaza la supervivencia de los enjambres.
Al margen de las coberturas que pueda ofrecer el seguro agrario, que no serán todas ni en todos los casos, Unión de Uniones de Castilla-La mancha ha solicitado en su escrito el apoyo económico para los damnificados, agricultores y ganaderos, que vienen, además, de sobrellevar con muchas dificultades la crisis precedente. “En esta situación desesperada, el seguro agrario no puede ser una excusa para que nuestro Gobierno regional se cruce de brazos” señalan desde la organización, que también apunta que “hay que seguir trabajando para mejorar en concreto el seguro de olivar y encontrar la fórmula que lo haga atractivo para los agricultores”.
“Esperamos que la Administración Regional sepa estar a la altura, porque lo que ha pasado no es para para que el Gobierno se desentienda”, concluyen.