Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos ha alertado de la crisis por la que atraviesan los productores de carne de cordero que está provocando el cierre de explotaciones de ovino y espera que la campaña de Navidad les ayude a superar esta situación.
Según la organización, tras revisar los precios al consumidor y al productor de la carne de cordero, ha advertido de un aumento significativo al primero con respecto al año pasado, cuyas estimaciones son en torno a un 17% comparando los precios hasta septiembre y sin tener en cuenta el gran pico que se produce en el precio hacia finales de año siempre.
Además, ha señalado que este incremento no está compensado de igual manera a los productores que estarían percibiendo están percibiendo sólo un 8,45% más por su producto cuando los costes de producción habrían aumentado más del 42%.
Asimismo, Unión de Uniones pide que se efectúe un mayor control sobre el etiquetado de los productos en el mostrador de la carnicería –no en los envasados – donde figure en un lugar visible el origen del cordero que no debería ser otro que dónde ha sido criado.
“Se están trayendo corderos y lechazos de Francia a mataderos de Castilla y León y es importante que el consumidor los pueda distinguir claramente de los españoles porque la calidad no es comparable”, comentan desde la organización. “No es de recibo que tras nuestro intenso trabajo, en una de las campañas más importantes del año, sucedan estas cosas, teniendo en consideración, no sólo el trabajo que realizamos sino el impacto que la ganadería extensiva tiene en la dinamización en el medio rural, la riqueza paisajística y de la biodiversidad”, añaden.
Unión de Uniones resalta que cada vez van cerrando más explotaciones de ovino, muchas también por el impacto que ha tenido el coronavirus, con el cierre durante meses del canal HORECA y el límite de reuniones sociales y familiares.
La organización insta a la Administración a que haga todo lo que esté en su mano para frenar el cierre de más explotaciones, apueste por una ley de cadena alimentaria justa y ponga en marcha las ayudas pertinentes para disminuir el impacto de los costes de producción debido, en gran medida, a la guerra en Ucrania.