La industria de alimentación y bebidas y representantes del sector primario han constituido una plataforma para rechazar la imposición de aranceles en Estados Unidos a sus productos como represalia por el conflicto contra Airbus en el marco de la OMC y exigen tanto al Gobierno de España como a la Unión Europea la “máxima implicación y firmeza” ante esta amenaza a uno de los sectores más dinámicos de la economía española como es el agroalimentario, según han informado en un comunicado.
En concreto, los sectores afectados como el aceite, el vino o el porcino, entre otros, se han alíado para reclamar soluciones ante un escenario que amenaza con “perjudicar seriamente” la solvencia de este mercado estratégico y que podría suponer la pérdida de más de 5.000 empleos en España.
De esta forma, en esta plataforma están presentes Fiab, Asoliva, Asemesa, Anice, FEBE, Fenil, FEV, Fenaval, Asozumos, Cooperativa Agro-Alimentarias, Asaja, Coag y UPA y coinciden en que la decisión adoptada por la Administración Trump, que entra en vigor este viernes, responde a una “medida injusta y perjudicial”.
El sector agrolimentario español reclama incrementar la presión negociadora hasta el último momento, tanto en las relaciones directas del Ejecutivo español con Estados Unidos, como por parte de la Unión Europea, para llegar a un acuerdo que evite la aplicación de los aranceles o al menos su “congelación”.
“No queremos ser moneda de cambio en una disputa ajena. Es fundamental la intervención al más alto nivel del Gobierno, la Comisión Europea y de los países aliados para evitar una guerra comercial abierta que será perjudicial en todas las direcciones”, señalan desde la plataforma.
Exigen medidas concretas y contundentes
En cualquier caso, desde el sector agroalimentario español se exige también a la Unión Europea que adopte “medidas concretas y contundentes” y recuerda que se puede hacer frente a la amenaza de la Administración Trump imponiendo tasas a productos estadounidenses.
“Bruselas cuenta con la aprobación de la Organización Mundial de Comercio (OMC) para imponer tasas a productos estadounidenses por valor de 4.000 millones de dólares”, han recordado.
Además, la plataforma agroalimentaria considera “necesario” que se empiece a trabajar de manera conjunta con los sectores en un plan concreto para la compensación a los afectados que pueda paliar el efecto negativo que provocarán los aranceles.
“Estas medidas deberían ser efectivas a partir del día 19 de octubre, un día después de la fecha que está prevista que los aranceles entren en vigor, hasta que se llegue a una solución pactada. Además, en el caso de la aceituna de la aceituna negra las medidas de compensación deben incluir el daño sufrido desde el 28 de noviembre de 2017”, han recalcado.
España exportó a Estados Unidos el pasado año por valor de 1.843,47 millones de euros y el país norteamericano es el primer mercado de destino de las exportaciones de alimentos y bebidas después de la Unión Europea.
Las medidas arancelarias ponen en peligro las ventas a este país de los ocho sectores más afectados -aceite de oliva, vino, aceitunas, quesos y otros lácteos, productos del porcino, zumos, licores, moluscos y frutas preparadas o conservadas-, y podrían suponer la pérdida de más de 5.000 empleos en España.