El ministro de Justicia y diputado nacional del PP por Cuenca, Rafael Catalá, se mostraba este martes en la capital conquense confiado en que el Gobierno central consiga poner en marcha “ese gran proyecto de inversión que es el silo de residuos nucleares”, en referencia al Almacén Temporal Centralizado (ATC) que el Gobierno central decidió instalar en Villar de Cañas en diciembre de 2011. Un proyecto industrial, dijo, “extraordinario para Cuenca”, capaz de “atraer inversiones y crear empleo” e, incluso, de permitir “que la población siga consolidándose en Cuenca”, aunque la provincia acumula una pérdida poblacional de casi 20.000 habitantes de 2012 a esta parte.
Asegura Catalá que el Gobierno central está “comprometido en llevarlo adelante” siempre “dentro de la ley”, obteniendo “las licencias que deben obtenerse”, y garantiza también el compromiso del Ejecutivo de Rajoy con “la seguridad”. El proyecto de ATC en Villar de Cañas tiene, ha dicho, “todas las las características y garantías técnicas para poder salir adelante”.
Critica así la oposición del Gobierno regional a esta infraestructura, para lo que el Ejecutivo que preside Emiliano García-Page optó por la ampliación de la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) de la Laguna de El Hito, pero se ha encontrado sin embargo con que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha no ha admitido a trámite el recurso de la Junta en el que este pedía dejar sin efecto el auto del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha (TSJCM) que anulaba la protección de este espacio natural, la cual hubiera impedido la construcción del ATC.
En opinión de Catalá, la oposición de la Junta al proyecto “es ideológica, no tiene ningún sentido” ni está basada “en fundamentos científicos ni jurídicos”, pese a los informes que maneja el Consejo de Seguridad Nuclear -algunos públicos y otros no, a pesar de la insistencia de Transparencia Internacional- sobre el “inadecuado” emplazamiento de Villar de Cañas.
Ayer mismo, el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural del Gobierno de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo, recordaba que los suelos del entorno de Villar de Cañas son de yeso, “lo que indica que no es el lugar más adecuado, o eso dice el Consejo de Seguridad Nuclear”.
Martínez Arroyo ha recordado que el proyecto todavía no cuenta con declaración de impacto ambiental positiva, por lo que es “surrealista” que desde el Gobierno de la nación “sigue empeñándose en hacerlo”. El consejero sigue insistiendo en que el modelo que defiende el Gobierno autonómico es “renovable y sostenible” frente a la apuesta por la energía nuclear.
También recordaba que Castilla-La Mancha ha comunicado a la Comisión Europea “todos los hechos” para que sea consciente de lo que sucede en Castilla-La Mancha, aludiendo a la iniciativa del Gobierno regional para ampliar la protección de La Laguna de El Hito y a las especies que la habitan junto a los terrenos previstos para el ATC, así como de lo que considera un “incumplimiento” de Directiva Europea Hábitats.