Blog dedicado a la crítica cinematográfica de películas de hoy y de siempre, de circuitos independientes o comerciales. También elaboramos críticas contrapuestas, homenajes y disecciones de obras emblemáticas del séptimo arte. Bienvenidos al planeta Cinetario.
‘Spotlight’, de Tom McCarthy: un silencio depredador
'Spotlight' es el equipo de investigación del diario ‘Boston Globe’. En esta sección, trabaja un grupo de profesionales que, en 2003, comenzó una investigación periodística contra la Archidiócesis Católica de Boston. Destaparon el sistemático encubrimiento de casos de sacerdotes pederastas que, durante décadas, abusaron sexualmente de menores en la ciudad. Unos datos escalofriantes que ponen al descubierto una verdad todavía más terrible que se nos queda atragantada en una frase, simple y estremecedora, de uno de los personajes principales, el abogado Mitchell Garabedian (Stanley Tucci): “Se necesita a toda una ciudad para abusar de un niño”. La complicidad, a fin de cuentas, de una sociedad que ignorando o enterrando el problema, permitió que sucediera una tragedia humana de estas características.
Frente a ello, la emoción visceral, el instinto casi animal que la búsqueda de la verdad mueve en algunos individuos es el nervio que recorre esta buena crónica sobre periodistas del director Tom McCarthy. Y en ese ‘recorrido eléctrico’, 'Spotlight' se embarca en una narración sobria, incisiva, seca, elegante. Sin concesiones al melodrama ni a la lágrima fácil. No son necesarios. El apasionante relato de la investigación es suficiente. Su estilo es discreto, prácticamente invisible y cuenta con un guion bien estructurado que sabe cristalizar una tensión creciente que nos permite disfrutar de momentos de eterno suspense. Los periodistas que realizan la investigación y, de su mano, los espectadores, acabamos desconcertados por la magnitud del crimen desvelado y atrapados por la sensación de mal presagio que nos invade. Una sospecha que acecha en todas las esquinas de una ciudad moralmente acabada.
Y es que es una película que respira autenticidad por todos los poros de su metraje. Desde el principio, en el instante en el que percibimos la pereza y el hastío de los jefes de sección del periódico, cuando el nuevo editor (Liev Schreiber) les obliga a retomar una investigación incómoda, que quedó traspapelada en noticias de segunda categoría. También queda de relieve en la inteligente decisión de filmar escasos testimonios de las víctimas, los “supervivientes”, para no desviar la atención del encubrimiento de la Iglesia. Logrado está también el fascinante, pero discreto retrato de uno de sus personajes principales, Mike Renzedes (Mark Ruffalo). Un hombre extraño, inquieto, el periodista más tozudo y decisivo del equipo Spotlight. Un personaje apenas perfilado más allá de su rol de ‘cruzado de la verdad’ que, sin embargo, está lleno de vida en la gran pantalla.
Una de las fuentes de información que ayuda en la investigación ofrece, con sus revelaciones, el clímax de la película. Es un psiquiatra que intenta ahondar en la raíz del problema de la pedofilia en la Iglesia Católica. Lo que cuenta abruma casi tanto como el hecho de que fueron muchos, una legión, los que tuvieron la posibilidad de acabar con los abusos, pero miraron a otro lado. Perturba tanto como conocer que, en todos los casos denunciados, los sacerdotes fueron apartados por la Iglesia temporalmente para “descansar” y, tiempo después, fueron enviados a otras parroquias donde continuaron cometiendo sus delitos con total impunidad.
Es imposible encontrar una explicación ante tanto silencio perverso. 'Spotlight' tampoco busca ofrecer respuestas, pero denuncia abiertamente la cobardía o la resignación peligrosa de las personas que tuvieron conocimiento de los hechos. Un fatalismo criminal que hiela la sangre.
“Todos hicieron su trabajo”
“¿Dónde estabas tú?”
'Spotlight' es el equipo de investigación del diario ‘Boston Globe’. En esta sección, trabaja un grupo de profesionales que, en 2003, comenzó una investigación periodística contra la Archidiócesis Católica de Boston. Destaparon el sistemático encubrimiento de casos de sacerdotes pederastas que, durante décadas, abusaron sexualmente de menores en la ciudad. Unos datos escalofriantes que ponen al descubierto una verdad todavía más terrible que se nos queda atragantada en una frase, simple y estremecedora, de uno de los personajes principales, el abogado Mitchell Garabedian (Stanley Tucci): “Se necesita a toda una ciudad para abusar de un niño”. La complicidad, a fin de cuentas, de una sociedad que ignorando o enterrando el problema, permitió que sucediera una tragedia humana de estas características.
Frente a ello, la emoción visceral, el instinto casi animal que la búsqueda de la verdad mueve en algunos individuos es el nervio que recorre esta buena crónica sobre periodistas del director Tom McCarthy. Y en ese ‘recorrido eléctrico’, 'Spotlight' se embarca en una narración sobria, incisiva, seca, elegante. Sin concesiones al melodrama ni a la lágrima fácil. No son necesarios. El apasionante relato de la investigación es suficiente. Su estilo es discreto, prácticamente invisible y cuenta con un guion bien estructurado que sabe cristalizar una tensión creciente que nos permite disfrutar de momentos de eterno suspense. Los periodistas que realizan la investigación y, de su mano, los espectadores, acabamos desconcertados por la magnitud del crimen desvelado y atrapados por la sensación de mal presagio que nos invade. Una sospecha que acecha en todas las esquinas de una ciudad moralmente acabada.