Un total de 14 provincias de la mitad norte peninsular estarán este lunes en aviso de nivel amarillo (riesgo) y naranja (riesgo importante) por nevadas, entre ellas Cuenca y Guadalajara en Castilla-La Mancha (en nivel amarillo). Según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) para este 22 de noviembre, se esperan nevadas copiosas en la cordillera Cantábrica occidental, sistemas Ibérico y Central y Pirineos.
El resto de provincias donde habrá riesgo de nevadas son: Huesca, Asturias, Cantabria, Ávila, León, Palencia, Salamanca, Segovia, Lleida y Madrid. Dicho aviso pero de nivel naranja (riesgo importante) se dará en Teruel y Zaragoza.
Según advierte la AEMET, se espera el paso de un frente atlántico en la Península y Baleares, con una atmósfera fría e inestable y predominio de cielos nubosos o cubiertos.
La cota de nieve en el norte de Castilla-La Mancha se sitúa en torno a 1600 metros al principio bajando al final hasta unos 700 metros en el oeste, unos 800-900 metros en el norte y por encima de 1400 metros en el sureste. Habrá brumas y bancos de niebla matinales.
Las temperaturas mínimas irán en descenso, que será solo ligero en el extremo este, y máximas en descenso, que será notable en Guadalajara; las mínimas se alcanzarán al final del día. Heladas débiles en zonas altas de Cuenca y Guadalajara. Soplará viento flojo de componente oeste al principio rolando pronto a nordeste en Guadalajara y a sur y sudeste después en Cuenca y Albacete.
Las temperaturas oscilarán entre los 7 y los 14 grados en Albacete, 3 y 12 en Ciudad Real, 3 y 10 grados en Cuenca, 2 y 9 en Guadalajara y entre 3 y 12 grados en Toledo.
Cuenca moviliza efectivos y sal
Ante esta previsión, la Comisión Técnica de Seguimiento del Plan de Emergencia Municipal de Vialidad Invernal (Pemuvi) en Cuenca ha mantenido una reunión para actualizar el protocolo de actuación y coordinar los medios humanos y materiales disponibles ante el inicio de la campaña invernal.
Como tal, hay disponibles más de un centenar de efectivos, una cuarentena de vehículos y en torno a 180.000 kilogramos de sal, apuntando que los silos de las pedanías ya están cubiertos de sal, según informaba el Ayuntamiento en una nota de prensa.