La provincia de Cuenca fue la menos castigada en Castilla-La Mancha durante la primera oleada de la pandemia en la pasada primavera. Su progresiva despoblación y la dispersión geográfica contribuyeron en este caso de manera positiva. No obstante, ha tenido la misma tendencia al alta que el resto de provincias en cuanto a positivos por COVID-19 desde el pasado verano y actualmente presenta una incidencia acumulada muy alta, con 393 casos por cada 100.000 habitantes.
Estos son los datos globales de la situación actual de la provincia. Puedes consultar la situación de cualquier otra provincia del país en la pestaña incluida en la parte superior del recuadro: