Las personas que quieran hacer actividades de turismo activo en el paraje de Las Chorreras, situado en la localidad conquense de Enguídanos, tendrán que pagar una tasa municipal de cinco euros por persona, incluido el monitor o monitores de la actividad.
Y es que el Ayuntamiento acaba de modificar la ordenanza municipal fiscal reguladora de las actividades realizadas por empresas de turismo activo en la localidad que ya fue aprobada de forma provisional por el Consistorio de la localidad y que ya que ha sido publicada en el Boletín Oficial de la Provincia de Cuenca con fecha 23 de noviembre al no haberse presentado ninguna reclamación.
Las empresas de Turismo Activo que hagan actividades en Las Chorreras tendrán que estar inscritas en el registro del Ayuntamiento y deberán solicitarle la reserva de sus actividades indicando el número de personas -monitor incluido- y hora prevista de la actividad.
El límite máximo cada hora es de 30 personas en total cada hora, incluyendo a los monitores, durante una franja de 12 horas y la limitación de tres vehículos por empresa utilizados para acceder al paraje natural.
En el anuncio, firmado por el alcalde, Sergio de Fed Cerezuela se recuerda que cabe interponer recurso contencioso-administrativo en el Tribunal Superior de Castilla-la Mancha hasta el 24 de enero.
Las Chorreras de Enguídanos estás formadas por un conjunto de pozas y cascadas en las que se practica el baño en unas aguas cristalinas vinculadas al río Cabriel en Cuenca. Precisamente, en la actualidad, se encuentra en información pública la documentación por la que se quiere conseguir la declaración del Valle del Cabriel como Reserva de la Biosfera por parte de la UNESCO.
Turismo de Castilla-La Mancha define al paraje como “excepcional y único” y sus aguas están consideradas “de las más limpias y cristalinas de toda Europa”. Se encuentra a unos cinco kilómetros del municipio junto al salto donde se ubica la Central Hidroeléctrica Lucas de Urquijo.
La zona que ahora queda regulada permite realizar rutas a pie por senderos señalizados, hacer recorridos en bici de montaña o a caballo y los amantes de las emociones fuertes pueden practicar rafting o puenting.