La Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha da como “absolutamente limpia y en los plazos previstos” la parcela que albergaba un cementerio ilegal de neumáticos en la localidad toledana de Seseña y que ardió el pasado verano.
El titular del departamento, Francisco Martínez Arroyo, ha detallado que, tras el incendio de neumáticos en Seseña-Valdemoro, se han retirado “1.300 toneladas de fracción metálica, 10.000 toneladas de neumáticos sin quemar” y acaba de finalizar la retirada de 20.000 toneladas de cenizas.
La limpieza ha costado cerca de seis millones de euros, “una cantidad inferior a lo presupuestado inicialmente”. Martínez Arroyo ha afeado al Gobierno central su falta de implicación económica para ayudar a asumir los costes, dado que fue un incendio que afectó a dos comunidades autónomas.
Pide más financiación para objetivos medioambientales
El consejero ha explicado que a partir de ahora, dentro del Plan Integral de Gestión de Residuos de Castilla-La Mancha, “las empresas van a tener que pagar una tasa por la gestión de residuos”, en la línea de generar actividad económica y aplicar el principio de 'quien contamina, paga' y que, como ha indicado, “no tengan que ser los ciudadanos de la región, los que paguen por los problemas medioambientales”.
El consejero ha participado en Madrid en la reunión del Consejo Consultivo de Política Medioambiental, celebrada en el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente. Al término de la misma aprovechaba para referirse al caso de Seseña y para mostar el agradecimiento del Gobierno regional a las personas que han trabajado en un incendio “como nunca antes se había producido en Europa, tanto en la extinción del fuego como en la limpieza”.
También ha puesto de manifiesto la necesidad de mayor financiación para hacer frente a los objetivos medioambientales, en el marco de los asuntos tratados en la reunión del Ministerio con las comunidades autónomas, relacionados con “la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y dentro del compromiso europeo, apoyado en los resultados de la Cumbre de París”.
En este sentido, Martínez Arroyo ha mostrado su interés por el “reverdecimiento” de las políticas comunitarias para este semestre en Bruselas, que se va a reflejar en el documento que irá al Consejo de Ministros de Medio Ambiente del próximo 28 de febrero. Este asunto pone de manifiesto “la importancia que tienen las cuestiones medioambientales”, desde el punto de vista de la economía y la generación de empleo, ha dicho.
En su faceta medioambiental, Martínez Arroyo ha citado textualmente a la Comisión Europea que asegura que “si se aplica de forma correcta la política de agua, garantizando la preservación del caudal ecológico de nuestros ríos, esto puede suponer una generación de riqueza por valor de 2.800 millones de euros en toda la Unión Europea”. Lo que significa, que “si hacemos bien los deberes podemos contribuir al desarrollo de nuestro territorio en Castilla-La Mancha” y esto “liga con la posición del Gobierno regional”, ha señalado.
Otro de los puntos tratados en el Consejo Consultivo, relevante para la Comunidad Autónoma castellano-manchega, es que “si se aplica de manera correcta la gestión de residuos a nivel comunitario puede suponer la creación de 400.000 empleos en la UE de aquí al año 2020”. Una política muy importante para el Gobierno regional que “ha puesto muchas esperanzas en un Plan Integral de Gestión de Residuos”, aprobado recientemente y que en palabras del propio consejero “puede ayudar a generar empleo en Castilla-La Mancha”.