Este blog se dedicará a hablar de uno de los fenómenos más incipientes de la actualidad: el mundo seriéfilo. Recomendará, analizará y traerá curiosidades de series de televisión estadounidenses, británicas, europeas y de otros países del mundo.
‘American Gods’, una de las series más esperadas de la temporada, es un viaje colorido y onírico por las carreteras secundarias de los Estados Unidos. Un ejercicio de estilo refinado y barroco que rodea esta adaptación de la novela homónima del escritor británico Neil Gaiman. Un autor que acuña una increíble imaginación a la hora recrear mundos y mitologías. Su gran afición a la novela gráfica le llevó a la creación de ‘The Sandman’ que se convirtió en un icono del género. También hizo sus pinitos en televisión con dos episodios de ‘Doctor Who’. Ha ganado y recogido un sin fin de premios y galardones. Una pequeñísima parte de su biografía que solo constata que, el escritor británico, se ha convertido en uno de los escritores a seguir.
Bryan Fuller, uno de sus showrunner, más conocido por la serie ‘Hannibal’, es un auténtico artesano de la composición audiovisual; solo hay que ver un capítulo para comprenderlo. En ‘American Gods’, Neil Gaiman, se transforma en un poderoso aliado, ya que es un excelente pintor de paisajes en sus libros. Su gran precisión para describir los lugares y espacios hacen de la novela un excelente caldo de cultivo para que Fuller desate toda su furia; y, sin duda, lo hace. Michael Green, que ha trabajado en ‘Smallville’ o ‘The River’, es el otro creador de ‘American Gods’. Serie creada para la cadena Starz con una primera temporada de ocho episodios y que ya está renovada por una segunda.
La serie es una suerte de road movie por las pequeñas y olvidadas carreteras de los Estados Unidos. No sé si los caminos del Señor son inescrutables o si es por culpa del destino pero, parece, que el sendero de Shadow Moon (Ricky Whittle), un ex-presidiario que acaba de perder a su mujer, se une al de Mr. Wednesday (Ian McShane), un excéntrico transeúnte con halo misterioso. Ambos se embarcarán en un polvoriento, onírico y mágico viaje hacia lo extraordinario.
No creo que sea un problema endémico de la actualidad, sin embargo, ya hay varios casos en el que un guión errático se esconde debajo del paraguas del estilo; que concibe un viaje con una panorámica asombrosa y espectacular a través de un camino pedregoso. El inicio de ‘American Gods’ te deja absorto, sin embargo, hasta el cuarto o quinto episodio su narrativa no comienza a carburar. Esto no es problema de Fuller y su equipo, ya que en la novela -en la que me encuentro en actual lectura- le pasa francamente lo mismo: problemas estructurales a la hora de desarrollar la historia. En el caso de la serie, Bryan logra exprimir al espectador a base de una fotografía asombrosa, colorista e hipnótica. Un estilo formal donde se da cabida a deidades, duendes y magos.
Tampoco puedo considerar ‘American Gods’ como un desastre narrativo ya que el tramo final de la temporada arregla, al menos un poco, el desaguisado inicial. Ese gusto exquisito por llegar al espectador a través de los sentidos quizás es suficiente para perdonar la excelsa dilatación de la historia; porque esta primera temporada se podría considerar con un prólogo extenso, con mucha tela -sobrante- que cortar. Una pena que puede hacer que muchos se borren de ‘American Gods’ a mitad de camino.
‘American Gods’ es una reunión de fábulas, cuentos, cantares e historias sobre seres mitológicos entre los que se encuentran dioses antiguos, de diferentes religiones, y dioses modernos. Un terreno lleno de referentes culturales que hacen las delicias a los cazadores de claves y pistas. El universo en el que se presentan estas deidades y seres resulta terriblemente magnético, hipnótico y onírico: desde el dios Thor pasando por Jesucristo y terminando por Media. Sin duda, la fortaleza de ‘American Gods’ no solo reside en su poderosa imagen, sino también, jugar con todos estos referentes.
Porque la historia de ‘American Gods’ es la lucha -o guerra- entre los dioses antiguos, nómadas y en franca decadencia, y los dioses nuevos, creados por los nuevas generaciones. Los primeros buscan volver a ganar esa dependencia de antaño y, por eso, el relato se salpica con flashbacks en los que ellos eran los únicos a los que la humanidad solía suplicar. Primigenios que viajaban a través de barcos o se extendían a través del boca a boca o del pequeño relato. Ahora, son algo viejo y denostado desplazados por nuevas mitología: medios, redes sociales, internet, dinero o la tecnología, entre otras cosas. Estos han conseguido llevarse la adoración y el fervor para llevar prácticamente al olvido a los primeros.
El tiempo ha hecho mella en las deidades antiguas que, ahora, muchas de ellas se encuentran ante un panorama que ha cambiado demasiado y, solamente, han sobrevivido las que de alguna manera se han adaptado a las nuevas mitologías. Sin embargo, Gaiman, decide proclamar la guerra de dos formas contrapuestas de ver la vida, con todo lo que ello conlleva. La primera temporada concluye en el momento más álgido; aunque, a mí parecer, se posterga demasiado.
El actor Ricky Whittle deja mucho desear como Shadow Moon, un personaje que tampoco llega a trascender, pésimamente desarrollado en esta primera temporada; claro que, también tiene al lado a Ian McShane, el gran Al Swearengen de ‘Deadwood’, que brilla con luz propia como Mr. Miércoles. Gillian Anderson que interpreta a Media se convierte en una roba escenas como Lucy (‘I love Lucy’), David Bowie o Marilyn Monroe, todos ellos iconos sociales y culturales; más protagonismo para ella, por favor. La pareja de secundarios formados por Pablo Schreiber (Mad Sweeney) y Emily Browning (Laura Moon) logran estar a la altura de los más protagonistas. Por último, queda la expectativa de lo que puede dar de sí en la segunda temporada Crispin Glover como Mr. World.
‘American Gods’ es una auténtica gozada para nuestros sentidos pero, sin duda, a vosotros os queda juzgar si el texto llega a esa altura, para mi, no. En España, se puede disfrutar a través del servicio de Amazon Prime Video.
‘American Gods’, una de las series más esperadas de la temporada, es un viaje colorido y onírico por las carreteras secundarias de los Estados Unidos. Un ejercicio de estilo refinado y barroco que rodea esta adaptación de la novela homónima del escritor británico Neil Gaiman. Un autor que acuña una increíble imaginación a la hora recrear mundos y mitologías. Su gran afición a la novela gráfica le llevó a la creación de ‘The Sandman’ que se convirtió en un icono del género. También hizo sus pinitos en televisión con dos episodios de ‘Doctor Who’. Ha ganado y recogido un sin fin de premios y galardones. Una pequeñísima parte de su biografía que solo constata que, el escritor británico, se ha convertido en uno de los escritores a seguir.
Bryan Fuller, uno de sus showrunner, más conocido por la serie ‘Hannibal’, es un auténtico artesano de la composición audiovisual; solo hay que ver un capítulo para comprenderlo. En ‘American Gods’, Neil Gaiman, se transforma en un poderoso aliado, ya que es un excelente pintor de paisajes en sus libros. Su gran precisión para describir los lugares y espacios hacen de la novela un excelente caldo de cultivo para que Fuller desate toda su furia; y, sin duda, lo hace. Michael Green, que ha trabajado en ‘Smallville’ o ‘The River’, es el otro creador de ‘American Gods’. Serie creada para la cadena Starz con una primera temporada de ocho episodios y que ya está renovada por una segunda.