Hace 15 años nacía en Albacete el primer grupo de consumo ecológico. Tierra Llana, que así se llama, empezó su andadura en enero de 2003 “con al intención de dar a conocer y favorecer la producción y consumo de ecológico en Albacete”. Lo cuenta Fernando Llobel, uno de sus promotores. Fue el primer punto de venta de estos productos en Albacete. “Entonces no existía nada parecido ni en Albacete, y prácticamente nada en el resto de España”, añade Llobel.
Cuando la aventura de Tierrallana nació sus cinco impulsores no se conocían. “Fue a finales del año anterior, hubo una reunión de productores y consumidores en las instalaciones del ITAP (Instituto Técncio Agronómico Provincial) y ahí iniciamos el contacto y empezamos a crear lo que luego se tradujo en Tierra Llana”.
El primer producto que vendieron fueron frescos (frutas y verduras). “Era lo más difícil pero también lo más escaso”. De ahí pasaron a los productos elaborados, las carnes y embutidos, llegando a un catálogo de más de 2.000 productos, incluyendo productos de limpieza y cosmética.
Llegó a ser la asociación más grande de España
Su forma de funcionamiento, a través de la asociación, y los productos de los que disponían, les hicieron crecer a un ritmo de 50 familias al año durante los primeros 8 o 10 años.“Iniciamos una experiencia que nos ha llevado a ser la asociación más grande de España (llegaron a contabilizar más de 500 familias)”, cuenta Llobel, quien asegura:.“Esto estaba muy bien hasta que ha durado”. La crisis no les hizo mella hasta bien entrado el año 2011 cuando poco a poco las grandes superficies les fueron comiendo terreno.
Fue su éxito lo que ha acabado con Tierrallana. “Demostramos que había una demanda de este tipo de alimentación y eso llevó a que los supermercados hayan introducido los productos ecológicos”. Y es que a partir de entonces han ido perdiendo socios y ventas “hasta que no hemos podido más”.
Tanto es así que el pasado mes de julio echaron el cierre y pusieron fin a Tierrallana y con ello se pierde una “herramienta social”. Y es que consiguieron movilizar a la ciudadanía. “Hemos estado luchado contra los transgénicos en Madrid, contra el fracking en Albacete y toda la región. Hemos sido una bandera bajo la que reuníamos a mucha gente”.