La Guardia Civil ha detenido a un hombre de 41 años por el robo de jamones de raza ibérica de un almacén de la localidad toledana de Polán por un delito de robo con fuerza. Estos jamones eran comprados por un segundo varón de 41 años con el objeto de venderlos de manera clandestina. Este último esta investigado no detenido por parte de la Guardia Civil por un delito de receptación.
A principios del año 2023 se inició el seguimiento y control en el almacén donde se guardaban los jamones de raza ibérica al darse cuenta que se habían cometido robos en el interior del local de manera continuada, aunque escalonada en el tiempo, según ha informado el instituto armado.
El presunto autor logró burlar las cámaras de video vigilancia instaladas en el almacén, por lo que se procedió a instalar unas cámaras cebo con las cuales se consiguió captar la imagen del autor de los hechos, el cual tapa el rostro para no ser reconocido.
El detenido podía controlar el horario de entrada y salida de los propietarios y trabajadores para entrar al interior del local utilizando una llave falsa y una vez dentro, sustraía los jamones en pequeñas cantidades para no levantar sospechas siendo más difícil detectar la falta de ellos en los inventarios.
Tras gestiones realizadas por la Guardia Civil de Polán se consiguió localizar a un varón de 41 años encargado de la recepción de los jamones sustraídos que tenía por objeto venderlos de manera clandestina, siendo el mismo investigado no detenido por parte de la Guardia Civil atribuyéndole un delito de receptación.
Se instruyen diligencias por parte del Puesto de la Guardia Civil de Polán, enviadas al de Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Toledo.