Atender “la discriminación múltiple que sufren las mujeres gitanas” es el objetivo de un decreto que ha aprobado el Gobierno de Castilla-La Mancha con ayudas directas de 59.900 euros para financiar el Proyecto Calí de promoción de la igualdad de las mujeres gitanas.
Así lo ha anunciado la consejera de Igualdad, Blanca Fernández, cuyo departamento asume parte del coste de un proyecto que calificaba de “muy interesante” y que desarrolla la “prestigiosa” Fundación Secretariado Gitano. De hecho el programa existe desde 2016 y se viene desarrollando en al menos 14 comunidades autónomas.
El grueso del coste del proyecto lo asume el Fondo Social Europeo con 442.146 euros a los que se suman también aportaciones privadas de más de 93.700 euros. Mientras, la Junta castellanomanchega asume el compromiso presupuestario en tres anualidades, hasta 2023
“Somos conscientes de la vulnerabilidad que sufren las mujeres gitanas y de su baja empleabilidad”, decía Fernández y por eso, el objetivo es “fomentar su visibilidad en positivo y mejorar sus oportunidades”.
El Proyecto Cali cuenta con tres ejes. Por un lado la inserción sociolaboral, un modelo de intervención integral y 11 acciones nucleares con itinerarios individualizados tanto sociales como pre-laborales, el acompañamiento y asistencia a las mujeres gitanas que sufren violencia de género que incluye apoyo judicial, así como la sensibilización hacia el resto de la sociedad.
Blanca Fernández ha destacado que entre 2016 y 2020 la Junta castellanomanchega ha invertido 678.000 euros para reducir la discriminación múltiple que sufren “infinidad de mujeres”. En concreto en este año 2020 están en marcha un total de 11 proyectos dotados con 175.000 euros para prevenir la violencia física y sexual y otros tipos de discriminación por discapacidad intelectual, la que padecen las mujeres migrantes o las que sufren explotación sexual.
Para 2021 la partida destinada a prevenir la discriminación múltiple ha experimentado un incremento del 56% en los Presupuestos de Castilla-La Mancha.