Quantum Minería defiende que no se ha medido el impacto ambiental de las tierras raras

La empresa Quantum Minería, que pretende llevar a cabo los proyectos de minería de tierras raras en el Campo de Montiel, ha considerado que las palabras del presidente autonómico, Emiliano García-Page, acerca de que presentará un informe que impedirá el desarrollo de estos proyectos, se deben a “un malentendido” por su parte, ya que “no es posible denegar algo que no ha sido presentado” ni “calificar un impacto ambiental que todavía no ha sido medido”.

Fuentes de la empresa han salido además al paso de algunas de las afirmaciones que las plataformas y asociaciones que rechazan el proyecto “repiten constantemente”, ante lo que ha visto la necesidad de “rebatirlas”. Según han explicado, la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) no se ha manifestado en contra del proyecto por falta de agua, sino que, según argumentan, esta entidad “se ha limitado a decir que no se puede usar agua del embalse de La Cabezuela”.

En este sentido, esgrimen que este proyecto se ha realizado “suponiendo que toda el agua se traerá en camiones cisterna desde fuera del área de la CHG”, además de que hay otras posibilidades. “Lo que es seguro es que el agua nunca será un problema”, añaden.

Otro de los extremos que Quantum ha querido rebatir es la acusación de que el proyecto “no estudia en profundidad algunos extremos ambientales”. “Estos estudios completos se realizarán una vez se defina por parte de la administración castellano-manchega el alcance del Estudio de Impacto Ambiental”.

Sobre las teorías de que el proyecto implica un riesgo radioactivo, aseguran que el Consejo de Seguridad Nuclear “se ha limitado a decir que el proyecto deberá ser analizado en su momento, como sucede en muchos otros tipos de proyectos”. Por otro lado, agregan que el Servicio de Protección de la Guardia Civil (SEPRONA) y la Universidad de Sevilla ya han realizado estudios radioactivos completos y han concluido “que las emisiones radioactivas están por debajo de los límites mínimos y no se requiere ninguna medida protectora”. “Nuestro proyecto estará exento y la radiactividad no es un problema”, zanjan.

También se refieren a las críticas sobre las consecuencias de la minería en China, del que distintas voces sostienen que ha repercutido en “consecuencias graves para el medioambiente”. “Son temas que no tienen nada que ver. Ellos trabajan minerales diferentes y radioactivos, hacen una minería compleja y tratamientos completos, con aditivos y bajo normativas que nada tienen que ver con las de la Unión Europea”, defienden desde Quantum Minería. Desde la empresa creen necesario rebatir estas acusaciones, algo necesario para “que el proyecto se reconduzca por la senda sosegada que nunca debió abandonar”.

Proyectos “juzgados” antes de ser presentados

Quantum Minería ha recordado que los permisos de investigación de Matamulas y Rematamulas fueron otorgados en los años 2013 y 2014. La evaluación del interés económico de estos permisos para el aprovechamiento de tierras raras se realizó rápidamente con más de 600 calicatas y todo tipo de ensayos, y el día 9 de octubre de 2015 se solicitaron tres concesiones de explotación.

“Esta solicitud marca un hito, pues sería la primera mina europea de unos metales declarados de interés prioritario para la Unión Europea según el 'Report on Critical Raw Materials for the EU' a fecha de mayo de 2014”, aclaran fuentes de Quantum Minería, que subrayan que la tramitación de estas concesiones se realizó presentando un anteproyecto y pidiendo a la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente de Castilla-La Mancha que fijase el alcance del necesario estudio de impacto ambiental.

“Este proceso se realiza después de consultar a los posibles afectados y, según la normativa vigente, debe realizarse en un plazo máximo de un mes. Pero la realidad es que llevamos doce meses y todavía no se ha definido el alcance”, han lamentado, añadiendo que parte del retraso se debe a la oposición activa de la Plataforma denominada 'Sí a la tierra viva', que incluso nos ha denunciado dos veces por delitos urbanísticos y ambientales, sin ningún fundamento, pues ya las denuncias han sido desestimadas.

Sin embargo, el mayor problema de este retraso es que el proyecto “ha empezado a ser juzgado y descalificado antes de ser presentado”. “No sólo lo está juzgando la Plataforma, sino incluso otros organismos y autoridades, que han emitido opiniones en lugar de recomendaciones, quizás porque el largo tiempo de espera les ha hecho equivocarse sobre la fase del trámite en que nos encontramos”.

Aseguran que hay aspectos “positivos” en el proyecto

Desde la empresa justifican como aspectos positivos de este proyecto que busca la obtención de metales que “son vitales para la industria moderna, el reemplazo de combustibles fósiles y energías limpias”.

“Es un proyecto estratégico, pues casi toda la producción mundial está en China, y todo occidente y especialmente en la Unión Europea están apoyando la minería y el tratamiento de tierras raras con todo tipo de subvenciones”, alegan. Por ello, Quantum Minería, “está aprovechando este soporte para construir una planta hidrometalúrgica de estos metales que no forma parte del proyecto de explotación, sometido a aprobación”.

“Esta posible planta todavía no tiene ubicación decidida, y estaría abierta a tratar concentrados de terceros. Sería una gran inversión, una cima tecnológica y un imán para otros proyectos de alto valor añadido. Nuestra mina sería la primera mina europea. Es la única no radioactiva, tiene una minería a cielo abierto muy sencilla y no utiliza ningún aditivo”, han enfatizado.

Abundan igualmente en que el proyecto “va a crear empleo y riqueza adicional, sin afectar para nada la riqueza ya existente en la comarca”. “Toda la zona va a verse beneficiada, y especialmente los municipios donde se encuentra la explotación”.

“Este proyecto no solo se propone evitar la dependencia en el mercado de las tierras raras, sino conseguir un abastecimiento basado en la política que caracteriza a la UE, consiguiéndolo hacer de manera sostenible, económicamente viable y teniendo en cuenta la protección del medio ambiente”.

Con estos argumentos, “la única petición es la tranquilidad, y esperar a que se complete el estudio de impacto ambiental”. “Creemos que este estudio dará respuesta a todas las preocupaciones, pues se cuenta con mucho conocimiento y con los mejores especialistas”.