El Viña Rock “goza de salud envidiable”: los dos años de pandemia no frenan el éxito del festival “más grande” de arte nativo

Un primer aplazamiento, un segundo aplazamiento, un tercer aplazamiento. “Todos muy duros”. Pero el festival más importante de Castilla-La Mancha y seguramente también de España, ha logrado celebrar por fin su 25 aniversario. Y lo ha hecho por todo lo alto. Las cifras son muy similares a las de otros años, con 240.000 asistentes durante la semana de celebración y un impacto económico de unos 22 millones de euros. 1.800 puestos de empleo directo y más de 3.000 indirectos. Una repercusión que llega a unos 50 o 60 kilómetros a la redonda.

Son las principales cifras de balance que ha hecho la organización del Viña Rock, que este año ha tenido como lema 'Libres'. El rastro de la pandemia apenas se han podido ver, las mascarillas y otras medidas han desaparecido como si nunca hubiesen existido. El director del festival, Juan Carlos Gutiérrez, ha explicado que ha sido “apelando al espíritu viñarrockero” que la organización se ha podido levantar cada vez más fuerte. “Felicidades al equipo por volver a conseguir que este sea el mejor festival”, recalcó, dando las gracias a la Junta de Comunidades, a los artistas y los patrocinadores, “a todo el mundo”.

También a los asistentes que, tal y como señala todos los años, han dado “lección de civismo y tolerancia” en la celebración del festival. Son cien bandas las que han pasado por los siete escenarios, con estilos de música tan variados como el reggae, el rock, el rap, el metal y la música alternativa en general. “Siempre buscando el equilibrio”. Gutiérrez se ha disculpado explícitamente por la coincidencia de los conciertos de Kase O y SFDK en la primera jornada del festival, pero ha señalado que son consecuencias de una compleja organización.

Gutiérrez ha señalado también que el festival busca apostar por las bandas con un futuro “más inmediato”, citando a Zoo, y también por las bandas más noveles. “Nos comprometemos a seguir trabajando y estar a la altura del público”, recalcó.

“Liga Champion”

El empresario valenciano David Sánchez ha asegurado que el festival juega en la liga “Champion”, gracias también a la colaboración y la “acogida” de los vecinos de la localidad. “El éxito es de miles de personas que no están aquí y que hay que agradecer, pero sobre todo a los vecinos de Villarrobledo”. En cuanto a los servicios ofrecidos, el empresario ha señalado que han sido 6.000 las personas que han venido en autobuses oficiales y más de 3.000 las que se han hospedado en el 'glamping' con las tiendas montadas por la organización.

Este año también se ha estrenado la tecnología 'cashless' que ha “evitado las colas” y hecho que todo sea “mucho más fácil”. También han afirmado que “se acabó el usar y tirar” con la incorporación de vasos reutilizables que tenían el precio de 2,5 euros. esto ha permitido tener el recinto, en general, en mejores condiciones de limpieza. “Estos años han sido complicados y siempre hemos trasladado al alcalde las inquietudes de la organización y del público”, finalizó.

Este año justamente se cumple el contrato de la empresa con el Ayuntamiento, y el alcalde de la localidad, Valentín Bueno, ha invitado a renovar para seguir con el festival. De hecho, les ha invitado a presentar una “gran oferta”. Para el ayuntamiento el “verdadero éxito” del festival es que no ha habido “ningún incidente” importante que reseñar. “Gracias por tener los brazos abiertos para recibir a miles de personas, porque es la seña de identidad de la localidad”, afirmó el concejal Bernardo Ortega.

Historia del festival

El alcalde de Villarrobledo ha destacado que ha tenido que pasar algo a nivel internacional para frenar la celebración del festival. “Hemos vuelto porque había ganas y la prueba es toda la gente que ha venido a Villarrobledo”, ha señalado Valentín Bueno. Se remontó a los inicios del evento, que salió adelante gracias al impulso de distintos concejales y alcaldes hasta llegar al modelo actual “más moderno” y profesional. Fue gracias a una concejala de Cultura, recordó, María Gutiérrez, que se siguió adelante. También se ha acordado de todos los alcaldes, Paco Segovia, Pedro Antonio Ruiz y Alberto González, que han impulsado la celebración del evento.

“Esto demuestra que hay una apuesta del pueblo, tanto de un color como de otro por que Villarrobledo tenga festival que es lo que se ha logrado este tiempo”, afirmó el edil. También ha pedido disculpas a los barrios que sufren “más presión” dentro de la localidad. “Este festival no sólo está vivo, crece y goza de salud envidiable”, recalcó. Para el pueblo lo que “más se ha echado de menos” ha sido “llenar las calles de color y de sonrisas, dentro de la tristeza y de haber estado encerrados y sin poder salir de casa”.

En 2023, el Viña Rock se celebrará también del 28 al 30 de abril.