El director chino Wang Quan'an ha situado su último filme, 'Öndög', en la estepa mongola -tierra natal de su madre-- para perfilar la cultura, sociedad y tradiciones mongolas, una forma de vida que parece estar abocada, como los dinosaurios, a una inminente extinción.
De hecho, el título de la película se ha traducido como 'El huevo de dinosaurio', punto de partida de un ciclo vital que se desarrolla de forma pausada, al igual que ocurre con el filme, acorde al concepto mongol del tiempo.
Con tintes de documental, esta historia ficticia y sin guion protagonizada, en primera instancia, por el paisaje comienza con el hallazgo del cadáver de una mujer.
En un entorno que deja paso a muy pocas comodidades, la policía intentará desentrañar lo ocurrido pero, hasta contar con los medios necesarios para la investigación, un joven e ingenuo agente (Norovsambuu) queda a cargo de la custodia del cuerpo hasta la llegada de los refuerzos.
Su único contacto con la humanidad en el centro de la nada será la pastora (Dulamjav Enkhtaivan) que vive más del lugar del crimen, quien le proporciona comida, protección, calor y contacto humano. Ante ellos, se extiende el vasto paisaje, tan extenso que incluso parece llegar a adentrarse en los propios personajes.
Además, las figuras del joven policía y la veterana pastora contraponen no solo dos formas de vida, sino también de culturas opuestas: a él le domina la naturaleza, mientras que la mujer convive en plena armonía con ella; a él le preocupa el cadáver que custodian, mientras que ella comprende que la muerte forma parte del eterno ciclo de la vida.
Con esta película, Wang Quan'an ha regresado a la que fuese la tierra de sus antepasados para inmortalizar la llanura y las diferentes formas de vida de Mongolia, las más ancestrales ya en vías de extinción y con todas las esperanzas puestas en un único huevo de dinosaurio.
El director
Wang Quan'an se graduó en la Academia de Cine de Pekín en 1991, y su primera película, 'Eclipse lunar', se proyectó en el Forum de la Berlinale en 2002. Dos años después, 'La historia de Er Mei' participó en Panorama consolidando su figura como importante autor de la llamada Sexta Generación de directores chinos, todos ellos graduados en los 80 y 90.
El interés de este grupo de cineastas por la proyección internacional se concreta, en este caso, en la primera participación del autor de 'Öndög' no solo en la Seminci, sino también en España.
Su tercer largometraje, 'La boda de Tuya', obtuvo el Oso de Oro a la mejor película en 2007. En 2009 su cuarta película, 'La tejedora', cosechó el Gran Premio Especial del Jurado en Montreal, mientras que al año siguiente el drama 'Separados', juntos inauguró la Berlinale y ganó el Oso de Oro al mejor guion; 'La llanura del ciervo blanco' participó en la Sección Oficial del mismo certamen en 2012, donde ganó el Oso de Plata por una Contribución Artística Sobresaliente.