Nissan ha dado marcha atrás en la propuesta de aplicar un plan de bajas incentivadas para 60 de los 475 trabajadores de la plantilla de la factoría que la multinacional tiene en Ávila, al señalar que “no está previsto” aplicar esta medida planteada a la representación sindical durante la reunión mantenida el pasado martes.
Fuentes de la compañía han confirmado a Efe esa decisión, enmarcando esta propuesta dentro de los contactos “normales” de trabajo entre la representación laboral y la dirección de la planta, con el objetivo de “mejorar la competitividad”.
“No está previsto aplicar dicha propuesta en la planta de Ávila”, han reiterado las mismas fuentes, después de que la representación sindical de la plantilla de Nissan en Ávila considerara que la aplicación de esta medida, puesta sobre la mesa el pasado martes, sería una reestructuración encubierta.
Y todo ello, después de que en 2017 se iniciara un proceso de reestructuración que supuso pasar e una planta de fabricación de vehículos industriales, a otra de componentes para la Alianza Nissan-Renault-Mitsubishi, que es como funciona en la actualidad en el polígono industrial de Las Hervencias, de la capital abulense.
Las fuentes de Nissan consultadas por Efe han reiterado que este tipo de reuniones entre el comité de empresa y la dirección entran dentro de la “normalidad absoluta”, para tratar de “mejorar la competitividad” de la factoría abulense, insistiendo en que la medida no se va a aplicar.
Las fuentes de la planta abulense consultadas por la Agencia Efe, señalaron que dicho plan de bajas iba a afectar a 60 trabajadores de entre 58 años y medio y 64, que irían abandonando la empresa en diferentes 'ventanas' entre junio de este año y diciembre de 2025.
Los 15 primeros estaba previsto que salieran a finales de este mes de junio, según las mismas fuentes, lo que hizo que el comité de empresa solicitara reunirse con el responsable de Recursos Humanos de Nissan, Jaime García, y con el responsable de Operaciones Industriales de la compañía, Javier Vila.
El planteamiento inicial de la multinacional japonesa chocaba con la propuesta inicial que realizó el comité de empresa, cuyos representantes solicitaron un “plan de rejuvenecimiento de la plantilla”, consistente en la “sustitución” de los empleados de mayor edad en talleres y oficinas, por otros más jóvenes.
Sin embargo, la “sorpresa” se produjo el martes cuando, en la primera de las dos reuniones con la dirección de la factoría, se les comunicó este plan de bajas que afectará a cerca de un 15 por ciento de la plantilla de la fábrica, en una decisión que da a entender “un futuro no muy halagüeño” para la factoría abulense.
Dicho plan afectaba a trabajadores que actualmente tienen 64 año y que serán los primeros en salir, pero también a otros que en la actualidad tienen 58 años y medio y que a finales de 2025 llegarán a los 60 años.