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García-Gallardo asegura que tiene “un amor infinitamente mayor” a sus principios que a su puesto

Alba Camazón

Valladolid —
9 de julio de 2024 16:41 h

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Lo que debía ser una comparecencia de mitad de mandato ha derivado en un debate sobre las políticas migratorias, los derechos humanos, el racismo y la continuidad del gobierno de coalición de Castilla y León, que integran PP y Vox.

El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo (Vox), ha asegurado que tiene “un amor infinitamente mayor” a sus principios que a su puesto en el gobierno autonómico después de que Vox haya anunciado que romperá los pactos de gobierno si el PP acepta el reparto de un centenar de menores migrantes que no estén acompañados por un familiar adulto. “No son advertencias o amenazas. Para nosotros es fundamental actuar contundentemente contra la inmigración ilegal”, ha asegurado García-Gallardo en su comparecencia en las Cortes de Castilla y León para informar sobre el grado de cumplimiento de los objetivos de su departamento para la legislatura.

García-Gallardo ha pedido al presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, que no permita que “ningún dirigente nacional” le diga lo que tienen que hacer, en referencia al presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, que hace días recuperó el discurso de la “solidaridad” y pedía a las autonomías que estuvieran “a disposición” de los gobiernos de España y Canarias para atender a los menores.

Este mismo martes, antes de que hablara García-Gallardo, Mañueco ha defendido que Castilla y León es “tierra solidaria” y va a estar “a la altura de esta situación” a pesar de la “incompetencia del Gobierno de Pedro Sánchez”. También ha asegurado que este miércoles en la conferencia sectorial su postura “no va a ser distinta de la que ha sido en otras ocasiones”.

García-Gallardo ha 'animado' al PP que “traslade a quien tenga que trasladar” su oposición que Mañueco tome una decisión “unilateral” que ignore “el criterio del socio” y que la oposición política sea “clara”. Solo el 6% de la población de Castilla y León es extranjera, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).

“Que se cumpla de verdad el pacto de gobierno, porque si no nos pone en una posición en la que no nos deja opción”, ha reivindicado el vicepresidente autonómico, que ha rechazado que sea la oposición quien “marque” sus “tiempos políticos” ni los del Partido Popular.

En varias ocasiones, García-Gallardo ha vinculado criminalidad e inmigración y ha asegurado que “las zonas más humildes” se están convirtiendo en “un gueto para marroquíes”. La tasa de criminalidad de Castilla y León es de 36,3 delitos y faltas por cada mil habitantes, la quinta cifra más baja de España.

La viceportavoz del Grupo Socialista en las Cortes, Patricia Gómez Urbán, ha pedido a García-Gallardo que haga “un ejercicio de responsabilidad” por relacionar la criminalidad con la inmigración. “Yo me siento muy orgullosa de esa España plural, que representan Nico Williams o Lamine Yamal, ellos representan mejor que usted los ideales de lo que representa ser español”, ha subrayado Gómez Urbán, que ha responsabilizado a Mañueco de que García-Gallardo haga sus afirmaciones como vicepresidente de la Junta de Castilla y León.

“Ya me dirá qué guerra hay en Marruecos”, ha ironizado García-Gallardo, quien ha negado tener “ninguna tendencia racista”. “Con lo que tenemos problemas es con lo que la gente trae en su cabeza: el machismo, el caminar cuatro o cinco pasos por delante de la mujer, impedirle desarrollar su actividad profesional, tapar a las mujeres el pelo porque eso es una provocación”, ha enumerado García-Gallardo antes de zanjar: “No queremos una Castilla y León de hiyabs, queremos una Castilla y León alegre, divertida, donde las niñas puedan vestirse como le de la gana. No quiero una Castilla y León islamizada”.

En varias ocasiones los procuradores de la oposición —entre ellos, varios del Grupo Socialista— han interpelado a García-Gallardo para que confirme si abandonará o no el gobierno de Mañueco si este accede a atender a este centenar de menores migrantes. “Sea usted valiente y diga qué va a hacer, que dice que no sigue órdenes de dirigentes nacionales”, le ha animado el procurador del Grupo Mixto Francisco Igea.