El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, se ha remitido a la primera línea del himno de León, que dice que “sin León no hubiera España”, para reafirmar que cualquier aventura territorial en estos momentos “no tiene margen” y que, por contra, lo que necesita España es “certidumbre y estabilidad”.
“No estamos para provocar situaciones de aventuras territoriales que generen un problema en nuestro país”, ha señalado el dirigente autonómico después de su reunión con el alcalde de León, José Antonio Diez, y el presidente de la Diputación de León, Eduardo Morán.
En la misma ha reconocido que respeta “profundamente la historia y la identidad”, pero ha puesto de manifiesto que desde la Junta de Castilla y León se apuesta “por tender puentes” y tratar de “solucionar los problemas y no crearlos”.
Fernández Mañueco ha explicado que “es admirador” de los historiadores, pero ha recordado que profesionales jurídicos ya han explicado que para conseguir esta autonomía requeriría “la renovación de la Constitución” y, a su juicio, “es pernicioso para España”.
El presidente de la Junta ha indicado que el diálogo debe servir “para mejorar la calidad de vida” de los leoneses y por esta razón es importante que “no se pongan cortinas de humo que tapen lo realmente importante”.
Además, ha reconocido que, por ejemplo, la decisión del cierre de las minas o de las centrales térmicas “no han sido de la Junta” y ha garantizado que estarán “al lado de esta tierra”, pero siempre ofreciendo “lealtad y discreción”.