Los reproches por el informe de residencias del Procurador del Común han centrado el debate de este martes en las Cortes de Castilla y León. El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha asegurado que el gobierno autonómico “respeta” al Común, Tomás Quintana, y a sus informes, pero estos están “sometidos a la crítica política”. Mañueco ha afeado que los informes del defensor del pueblo autonómico no son “dogma de fe” y sus opiniones “están sometidas a la opinión” de otros, a pesar de que Quintana lidere una institución “muy respetada y creída”.
Tanto el Grupo Socialista como el Grupo Mixto -a través de Podemos- han interpelado a los dirigentes de la Junta de Castilla y León tras las críticas vertidas a su informe, que vinculaba la mortalidad en las residencias con la limitación en las derivaciones a los hospitales, que ambos grupos han calificado de “vergonzosas”. La procuradora socialista Nuria Rubio ha reprochado que la Junta haya “menospreciado” al Procurador del Común “y a todas las familias que plantearon sus quejas” tras verse afectadas por la gestión de la primera ola en las residencias.
Rubio ha recordado que próximamente comenzará la comisión de investigación de las residencias de mayores, en la que “se conocerá la verdad”. “En la comisión sabremos si no tuvo rigor el Procurador del Común o si no la tuvieron ustedes la Junta] en la gestión”, ha esperado la procuradora socialista.
La consejera de Familia, Isabel Blanco, ha acusado a los socialistas de no querer saber qué pasó en las residencias, si no de querer “hacer un uso torticero de los datos”. Para defender su gestión, Blanco ha aludido al archivo de la Fiscalía, que veía que se habían tomado las medidas “necesarias” para asegurar los cuidados médicos “con las debidas garantías sin que la hospitalización fuera necesaria”.
“La necesidad de derivación de los residentes debía ser adoptada por los profesionales de la medicina. Con criterios médicos se decidía la hospitalización de mayores. Esto es una realidad, no una percepción”, ha destacado Blanco.
En la misma línea ha respondido a Podemos el vicepresidente y portavoz autonómico, Francisco Igea: “Yo dije que el informe estaba falto de rigor, porque la Fiscalía ha dicho que no hay caso penal, que no se abandonó a la gente, que no se dieron órdenes de no asistir. Y la Fiscalía es tan respetable o más que el Procurador del Común”.
El procurador de Podemos, Pablo Fernández, ha tildado de “vergüenza y vomitivo” que la Junta “cargue ” contra el Procurador del Común y ha acusado a Igea de ser un “mentiroso compulsivo”. “Es a la verdad lo que Mañueco a la oratoria”, ha cargado contra Igea, quien le ha respondido: “Que venga aquí a hablarnos de respeto institucional es como que Nacho Vidal venga a hablarnos de castidad”. Fernández ha afeado a la Junta de Castilla y León de que solo le interese “salvar el trasero y tapar sus miserias”.
El vicepresidente del gobierno autonómico ha reprochado a Fernández que le reclamara respeto institucional con el Común. “Se permite el lujo de hablar de respeto institucional, el partido que llamó 'doctora Menguele' a la consejera y llama criminales, asesinos y corruptos a todo el que les lleve la contraria”, ha afeado.
Francisco Igea también ha abordado la comisión de investigación de las residencias, a la que no tiene “ningún temor”, según ha asegurado. “Estoy deseando que empiece y poder escuchar qué hizo el Gobierno, por qué razón en mitad de la crisis el ministro se dio a la fuga, el presidente se dio a la fuga y el vicepresidente se fue a una campaña a Madrid”, ha apuntado.