El Ayuntamiento de Palencia ha alegado sus competencias municipales para exigir a Adif y a la empresa adjudicataria de las obras de Alta Velocidad (AVE) ferroviaria a Cantabria, que se ejecutan en la salida norte de la ciudad, que cumpla la normativa.
La autoridad municipal ha pedido, en concreto, la retirada de las pantallas colocadas frente a las casas del Camino Viejo de Husillos, que no corte esta calle y no trabaje por la noche para defender los intereses de los vecinos afectados.
La alcaldesa, Miriam Andrés (PSOE) ha comparecido este miércoles en una rueda de prensa para exponer las medidas que adoptará para proteger a los vecinos, dentro de sus competencias, después de que la empresa adjudicataria haya anunciado el corte del Camino Viejo de Husillos y el inicio de trabajos nocturnos.
Herencia política
En clave política, ha recordado no obstante que el actual equipo municipal de Gobierno (PSOE) se encontró a su llegada al Ayuntamiento de Palencia con un proyecto constructivo de Adif en el tramo Palencia-Palencia Norte ya aprobado, al que el anterior equipo de gobierno (PP-Cs) “no se opuso ni alegó cuando podía hacerlo”.
A pesar de eso, desde que el PSOE llegó a la Alcaldía, “con el proyecto constructivo ya aprobado de forma definitiva”, como ha precisado el concejal de Urbanismo, Álvaro Bilbao, se han dado pasos para determinar si cumplía o no los estudios informativos de soterramiento del ferrocarril.
Estos pasos ha consistido en reuniones con Adif para que modificara el proyecto o un requerimiento administrativo, un recurso contencioso administrativo para pedir la nulidad de la aprobación del proyecto constructivo y la paralización cautelar de las obras que ha sido denegada.
Bloques de hormigón
A finales de la pasada semana la empresa adjudicataria de las obras del tramo Palencia–Palencia Norte empezó a colocar bloques de hormigón en la acera del Camino Viejo de Husillos, zona en la que tienen una ocupación temporal y se comunicó al Ayuntamiento que se iba a cortar esta calle durante cuatro o cinco meses para cambiar el colector.
Al respecto, el concejal ha explicado que el ayuntamiento está obligado a mover el colector, “salvo que queramos que se nos impongan multas mensuales cuyo importe total puede ascender hasta 24 millones de euros”, si no cumplen la Ley del Sector Ferroviario. “No podemos hacer otra cosa. La Ley nos obliga”, ha zanjado.
Pero sí puede actuar en el marco de sus competencias, en materia de accesibilidad, exigiendo que los vecinos puedan disponer de un itinerario peatonal de 1,8 metros de ancho para acceder a su casa. En materia de seguridad en la vía pública, obligando a respetar una anchura mínima libre de tres metros para la aproximación de vehículos de extinción de incendios y emergencia; y para exigir a Adif que cumpla la ordenanza municipal contra las emisiones de ruidos y vibraciones.
Requerimiento a la empresa y Adif
Por todo ello el Ayuntamiento ha enviado un requerimiento a la empresa que ejecuta las obras y a Adif para que esta misma semana retire de la acera las pantallas acústicas.
“En caso de que no lo hagan, el lunes se iniciará una orden de ejecución para que el Ayuntamiento las retire de oficio y se pase la factura a la empresa adjudicataria”, ha indicado la alcaldesa.
También han exigido que se asegure el tránsito rodado de coches en el carril derecho del Camino Viejo, con el fin de que cualquier vehículo pueda acceder al mismo, y que cumplan la normativa de ruidos impidiendo las obras por la noche.
De hecho se ha pedido a la Policía Local que esté presente desde las 7 de la mañana en la obra, con el fin de que velen por el cumplimiento de la ordenanza de ruidos, no pudiéndose trabajar entre las 22 y las 8h, y que mida los ruidos y vibraciones incluso en el domicilio de los vecinos que lo soliciten.