La Universidad de Burgos (UBU) abre una convocatoria de ayudas, dotada con 25.000 euros, para que estudiantes universitarios de Gaza puedan continuar sus estudios de grado, máster o doctorado en la institución académica, tanto de manera presencial como a través de formación online.
Las ayudas derivan de la Cátedra Francisco González Alonso y se canalizarán a través del programa UBU Refugio, de largo recorrido y que recientemente ha ayudado a una veintena de estudiantes ucranianos, ha recordado en rueda de prensa el rector de la institución burgalesa, Manuel Pérez Mateos.
La convocatoria, que se abre este miércoles, se gestionará a través de ONGs y asociaciones internacionales y ofrecerá dos becas para estudios presenciales en Burgos, ya de cara al próximo curso 2024/2025, que cubrirán gastos de matrícula, manutención y alojamiento.
También se ofrecen otra decena de ayudas para que, debido a los problemas de desplazamiento que se derivan del conflicto bélico en la franja de Gaza, los alumnos puedan cursar formación online. En este caso, las ayudas cubren la matrícula a cursos formativos de cualquier ámbito.
Pérez Mateos ha indicado que, en función de la demanda recibida, podrán incrementar el presupuesto destinado para las ayudas, que están también abiertas a cualquier estudiante de Palestina, pues el objetivo del programa UBU Refugio es atender a la población refugiada por el conflicto bélico de Oriente Medio.
Por su parte, el director de la Cátedra, Francisco González, ha deseado que los alumnos que se beneficien del programa “encuentren el cobijo necesario” y ha insistido en que la función de las universidades es intentar que los conflictos acaben, ser un foro de mediación y entendimiento, y “ojalá sirva para esto las becas”, ha apuntado.
El rector: “Apoyar a la población civil de Gaza no es ir contra Israel”
El rector ha insistido en que “apoyar a la población civil de Gaza y Cisjordania y a su comunidad universitaria en modo alguno va en contra de Israel”, al tiempo que ha asegurado que son “plenamente conscientes” de que la mayor parte de las universidades israelíes son defensoras de la paz y la convivencia y cuentan con un 20 % de alumnos árabes o palestinos.
“La UBU, al igual que hizo con los refugiados de Ucrania, seguirá apoyando las comunidades universitarias de cualquier país que necesite ayude o esté sometido a conflictos bélicos, que condenamos”, ha aseverado.
Y ha vuelto a recordar, como ya hiciera la semana pasada, que la universidad no mantiene ningún convenio con ningún centro israelí, pero sí quiere mantener la buena relación que tiene con la comunidad universitaria de israel.
Haciendo suyo el comunicado de la CRUE (Conferencia de Rectores y Rectoras de Universidades Españolas), Manuel Pérez Mateos ha vuelto a manifestar la “repulsa sin paliativos contra las acciones del grupo terrorista Hamás”, especialmente contra la matanza del 7 de octubre, y ha reclamado la liberación inmediata de los secuestrados.
“El grupo terrorista actúa en contra de la convivencia pacífica en la región”, ha admitido, pero al mismo tiempo ha querido demandar “con al misma contundencia” al estado de Israel que cumpla con el derecho internacional, cese de inmediato la intervención bélica y permita la entrada de ayuda humanitaria a Gaza.
Además, ha destacado que la comunidad universitaria de Burgos se ha podido manifestar libremente y con total respeto sobre el conflicto, y ha demandado que en el ejercicio de esa libertad de expresión no se registren conductas de antisemitismo ni islamofobia, ni cualquier otro comportamiento de odio, que son “inadmisibles”.