El juez envía al agresor del metro de Barcelona a un centro de menores durante dos meses

Un juzgado de menores ha ordenado este martes el ingreso del agresor racista del metro de Barcelona a un centro de menores durante dos meses. Se trata de una medida cautelar, según han indicado fuentes de la fiscalía. El joven, que propinó una paliza a un vecino de Santa Coloma de origen mongol de 25 años, se ha negado a declarar ante el magistrado esta mañana.

El autor de la paliza racista está acusado de una falta de lesiones y de un delito de odio y discriminación. También están imputados como coautores de la agresión sus dos acompañantes, uno de los cuales, mayor de edad, grabó los hechos y los publicó en su canal de Youtube, bajo el nombre de @Payo_Cura. El vídeo suscitó un amplio rechazo en las redes sociales, y animó a la búsqueda de la identidad de los agresores por parte de los usuarios, en paralelo a la actuación policial, que culminó ayer con la detención del menor agresor.

Los hechos ocurrieron el sábado 28 de junio en la línea 1 del metro de Barcelona, a la altura de la parada de Fabra i Puig. Tras intercambiar algunas palabras, el menor de aspecto rapado propinó varios puñetazos al joven mongol, que estaba sentado en su asiento. Intervinieron algunos pasajeros para separarles, y la víctima terminó empujada hacia el andén, aunque luego volvió a subir al mismo comboy y los agresores bajaron. Al llegar a su parada, el agredido pidió ayuda y fue trasladado al hospital.

Se desconoce por ahora la situación procesal de los otros dos imputados. Uno de ellos es menor y el otro mayor de edad, por lo que deberán comparecer ante un juzgado de menores y uno de instrucción, respectivamente.

Interior se felicita por la ausencia de partidos racistas

El ministro del Interior, Jorge Fernández-Díaz, se ha referido hoy a la agresión al salir de la Comisión de Control de Gastos Reservados. Tras pedir a los ciudadanos que “estén atentos” a cualquier “sospecha o indicio” de conducta racista, ha celebrado que, según él, en España no hay partidos de corte xenófobo, como sí ocurre en otros países europeos.

Así pues, el ministro considera que España puedes estar “razonablemente orgullosa” porque, a su modo de ver las cosas, la sociedad “es enormemente tolerante y respetuosa con el diferente”. “En España no hay formación política con representación parlamentaria, ni siquiera con votos, que se caracterice por defender conductas racistas”, ha proclamado.