El president de la Generalitat, Pere Aragonès, se ha dirigido este viernes por primera vez a los catalanes en el tradicional mensaje de la víspera de la Diada para hacer una promesa sobre su principal objetivo político en esta legislatura. “El referéndum es un compromiso democrático del todo irrenunciable ante el que no descansaré hasta hacerlo realidad”, ha asegurado el nuevo jefe del Govern, investido en mayo pasado. Según ha afirmado, el referéndum es “la propuesta más inclusiva para resolver conflictos como el que vivimos”, por lo que será una de sus reclamaciones en la mesa de negociación con el Gobierno.
En la víspera del día nacional de Catalunya pero, también, de la cita con el Gobierno central que tendrá lugar el jueves o viernes de la semana que viene en Barcelona, Aragonès ha asegurado que trasladará a esa mesa “la fuerza que demostramos cada Once de Septiembre llenando plazas y calles de todo el país”. El líder de ERC ha remarcado la importancia de este proceso de negociación, del que ha dicho que es algo que “Catalunya no había conseguido nunca antes”. “Era impensable que España reconociera la propia existencia de un conflicto político”, ha subrayado.
Por esa razón Aragonès ha llamado a la ciudadanía a acompañar esta mesa de diálogo “con toda la ambición”. “Tenemos que afrontarla uniendo esfuerzos, construyendo confianzas dentro y fuera de Catalunya”, ha dicho, porque es un proceso “lleno de obstáculos que necesitará tiempo, unidad y perseverancia”. Una reclamación de unidad de Aragonès que llega después de los mensajes cruzados entre ERC y Junts precisamente por la desconfianza de los últimos en la negociación con el Gobierno.
El mensaje político del president también ha contenido una referencia a otro de los grandes asuntos de la actualidad catalana, como es la suspensión por parte del Ministerio de Transportes de la ampliación del aeropuerto de El Prat. “La defensa del medio ambiente y de la biodiversidad debe guiar todas y cada una de las decisiones que nos corresponde tomar, y lo tiene que hacer teniendo bien presente el legado que queremos dejar a las generaciones que vienen”, ha asegurado Aragonès. “Necesitamos una transformación verde para afrontar el cambio climático, para adaptarse a ellos y mitigar sus efectos”, ha añadido.
El jefe del Govern ha pronunciado el tradicional discurso de la Diada desde fuera del Palau de la Generalitat y, en concreto, desde el recinto modernista del Hospital de Sant Pau. Un punto elegido por Aragonès para hacer una referencia a la situación sanitaria y a la vacunación. “La pandemia condiciona y seguirá condicionando nuestras vidas. ha provocado una profunda crisis social, económica y emocional que agrava las dificultades preexistentes”, ha dicho, tras lo que ha hecho “un reconocimiento a todos los profesionales sanitarios, de residencias y al resto de servidores y servidoras públicos que conjuntamente con los profesionales de actividades esenciales han procurado por nuestro bienestar durante todos estos meses”.