La Audiencia de Barcelona ha suspendido el ingreso en prisión de la exdirectora financiera del Palau de la Música, Gemma Montull, condenada a 4 años de cárcel por el saqueo del auditorio. La decisión ha dividido el tribunal, ya que uno de los magistrados ha formulado un voto particular contra el criterio de la mayoría de permitir a Montull seguir en libertad.
En un auto, la sección 10a de la Audiencia de Barcelona acuerda suspender el ingreso en prisión de Montull siempre que no delinca durante cinco años, que en este periodo realice 365 días de trabajos en beneficio de la comunidad y que además de los bienes que ya tiene embargados abone 500 euros al mes para devolver el expolio. Si incumple una de estas tres condiciones, advierte el tribunal, Montull ingresará en la cárcel.
Montull era la última de las condenadas por el caso Palau que esperaba la decisión de los jueces sobre si debía ir a la cárcel. Hasta ahora el tribunal había acordado de forma unánime el ingreso en prisión de los principales jefes de la trama, el expresidente del Palau, Fèlix Millet; su exnúmero dos, Jordi Montull –padre de Gemma–; y el extesorero de Convergència Daniel Osàcar –que ya disfruta del tercer grado, a diferencia de los otros dos condenados.
En el caso de Gemma Montull, el tribunal se ha dividido: la presidenta de la sección 10a, Montserrat Comas d'Argemir, y la magistrada Vanesa Riva han acordado la suspensión del ingreso en prisión al valorar el “esfuerzo reparador” de Montull para devolver el dinero del saqueo del Palau así como su carencia de antecedentes penales, la confesión del expolio y del cobro de comisiones de Convergència que realizó en el juicio y el largo tiempo transcurrido –once años– desde la comisión del delito.
Respecto a la devolución del dinero las magistradas destacan que Montull tiene embargados bienes que superan el millón de euros para “garantizar” el reintegro al Palau del millón y medio de euros que saqueó, y que además se ofreció a pagar 400 euros al mes –cifra que el tribunal eleva a 500– para completar el pago de la responsabilidad civil a la que fue condenada. Su padre y Millet tienen que devolver 24 millones, de los que ya se han recuperado 9,2 a la espera de la venta del resto de patrimonio que tienen embargado.
Por contra, el magistrado José Antonio Lagares se opone a la decisión mayoritaria del tribunal al considerar que Montull tuvo un “papel decisivo en el mayor expolio de la historia reciente contra el patrimonio cultural catalán y uno de los más importantes y sonados casos de corrupción política”.
Al contrario que sus colegas de tribunal, el juez Lagares no aprecia en Montull “un esfuerzo para reparar el daño causado”. Sostiene el magistrado que el ofrecimiento de sus fincas no es una forma de devolver el saqueo sino una mera “relación de bienes” en la que Montull incluyó patrimonio sujeto a deudas con Hacienda o bancos.
Además el juez duda de que Montull pueda devolver el expolio con los bienes que tiene embargados ya que a día de hoy “no puede saberse cuánto dinero puede obtenerse de la venta judicial” de sus inmuebles. A criterio del magistrado, Montull “no ha reparado el daño causado en proporción a sus posibilidades económicas”, en referencia al abundante patrimonio que, junto al dinero que tenía en sus cuentas cuando fue embargada, ascendía a 3,2 millones de euros.
Recuerda el magistrado que en el registro del Palau en el año 2009 Gemma Montull retiró de uno de los ordenadores un USB que contenía la contabilidad falsa por la que luego fue condenada junto a su padre y Millet y que lo guardó en su bolsillo para ocultar pruebas. Todo ello, agrega el juez, demuestra la “gravedad de los hechos” por los que fue condenada Montull.
Es más, frente a la argumentación de Montull de que su ingreso en prisión le privaría de llevar a cabo las labores de voluntariado que realiza, el magistrado replica que sería “mucho más loable” que la exdirectora financiera del Palau se pluriempleara porque de esta forma destinaría sus “remuneraciones extra” a la devolución del saqueo.