La activista de los CDR Tamara Carrasco, acusada de desórdenes públicos, no podrá desplazarse de Viladecans a Sant Vicenç dels Horts para visitar a su madre, que se ha roto una pierna. El juez de la Audiencia Nacional Diego de Egea ha denegado este lunes el permiso solicitado por Carrasco, a quien impuso medidas cautelares como la prohibición de abandonar su municipio de residencia.
El juez rechaza la petición de Carrasco al considerar que la excepción está prevista solo para “visitas médicas” y “no de otro tipo como el domicilio de la madre”. La activista cumple con las medidas cautelares desde mediados de abril, cuando fue puesta en libertad por orden del magistrado después de descartar que pudiera haber cometido delitos de rebelión o terrorismo, tal como proponía la Fiscalía.
En el auto hecho público este lunes, el juez deniega también la petición de la acusada de trasladar el caso a los juzgados de Gavà (Barcelona). El texto hace referencia a que la misma resolución de la Sala de lo Penal de la Audiencia que confirma la libertad provisional para Carrasco “señala expresamente que habrá que estar al resultado final de las investigaciones para determinar la naturaleza de los hechos”.
Según la la Fiscalía, esta activista integró “un reducido equipo de dirección” que supuestamente determinaba “las pautas de actuación y las consignas de movilización” de los CDR, con “actos de rebeldía, encaminados a normalizar la desobediencia y exteriorizar la confrontación con el Estado”.