El juzgado de lo Penal número 25 de Barcelona ha condenado al mantero Sidil Moctar a cinco años de prisión por golpear con una rama en la Barceloneta a un Guardia Urbano que previamente le había confiscado sus mercancías. La jueza Maria del Prado García Bernal considera al vendedor ambulante autor de los delitos de atentado a la autoridad y lesiones. Otro mantero, C.S., ha sido condenado a dos años y medio de prisión por el mismo incidente.
El abogado del mantero, Andrés García Berrio, ha denunciado en declaraciones a este diario que “el componente racial” ha tenido especial importancia en la sentencia, y ha destacado que esta redunda en demasiadas ocasiones en la “agresividad” del condenado. Por contra, la jueza remarca en el mismo texto que “el hecho de que fueran o no senegaleses resulta irrelevante”.
En el fallo, la jueza ha dado total veracidad al relato de los hechos de los agredidos y a los testigos, una decena de agentes de la guardia urbana y un mosso d'esquadra que circulaba en moto por la zona en el momento de los hechos. Asimismo, ha destacado que la actuación de la policía “fue correcta en todo momento” y que, por contra, los condenados “pusieron en peligro no solo a los agentes sino a los ciudadanos que estaban en la zona”. Sidil Moctar está en prisión preventiva desde el 20 de mayo por estos hechos.
La sentencia contempla la expulsión del país del vendedor ambulante y le impede regresar a España durante diez años. García Berrio ha indicado que, en base al artículo 89 del Código Penal, la expulsión del país serviría “para sustituir a la condena de prisión”. El letrado ha indicado que valora recurrir la sentencia a la Audiencia de Barcelona.
El mantero ingresó en prisión en base a un vídeo editado de nueve segundos en el que se le veía huir de la policía y golpear a un agente con una rama. La defensa y el Gobierno de Colau –que medió para evitar la encarcelación del mantero– entendieron la prisión preventiva por riesgo de fuga como “desproporcionada”.
Días después que Moctar entrara en prisión, cientos de vendedores ambulantes se manifestaron por las calles de Barcelona pidiendo su libertad. “Hoy no hemos salido a vender, hemos salido a pedir libertad”, exclamó el Sindicato Popular de Vendedores Ambulantes, que ahora valora qué medidas llevar a cabo tras la condena conocida este martes.