Catalunya seguirá sin bares y restaurantes al menos dos fines de semana más. El comité técnico del Plan de Emergencias de Protección Civil de Cataluña (Procicat) ha acordado este jueves mantener el cierre de la hostelería y los espacios culturales como cines y teatros en toda la comunidad durante otros diez días, hasta el próximo 23 de noviembre. En la reunión de este jueves, sobre la que los sectores afectados habían puesto toda la presión, no se han acordado cambios sustanciales, más allá de la reapertura de los centros de estética y masaje. También se han limitado los servicios religiosos a 100% en total, además de mantener el límite 30% del aforo.
La consellera de Salut sí ha anunciado, en cambio, que la Generalitat comenzará a elaborar un plan de desescalada en la hostelería para comenzar a implementar una vez se cumplan los 10 días de la prórroga. “Necesitamos estos 10 días, los necesitamos”, ha asegurado el secretario de salut pública, Josep Maria Argimon. “¿Por qué tenemos que mantenerlo, sin las cifras mejoran? Porque cuatro de cada 10 actuaciones en atención primaria son de COVID, tenemos más de 2.600 personas ingresadas y, sobre todo, prácticamente 600 personas en la UCI”, ha relatado el experto.
En el mismo sentido se ha expresado Vergés, que ha asegurado que el ritmo de contagio baja “gracias al esfuerzo de todos”. “Tenemos una Rt del 0,87, y por tanto por debajo del 1. Pero no es suficiente, tenemos que doblar también la curva de la presión asistencial”, ha asegurado la titular de Salut. “Es imprescindible hacer un esfuerzo más ahora que estamos en la buena dirección”, ha animado la consellera, que ha indicado que las medidas duras “no gustan a nadie” pero deben tomarse con anticipación.
Los responsables de salud han subrayado que entienden la dureza de las medidas que están reclamando, sobre todo para algunos sectores. Sin embargo tanto Vergés como Argimon han tildado de necesario para evitar el colapso de los servicios públicos que, según han descrito, se encuentran en una situación sensible. “Cuando pasen estos diez días no saldremos con unos indicadores mucho mejores”, ha reconocido Argimon, “pero sí en una situación que nos permitirá controlar mejor la pandemia y volver a la actividad”.
El conseller de Interior, Miquel Sàmper, también ha puesto como horizonte el día 22 de noviembre, momento en el que según ha dicho se tratará de llevar a cabo una “descompresión”. Hasta ese momento habrá aún una semana y media de toque de queda nocturno, que se mantiene en los mismos horarios, y dos fines de semana de confinamiento perimetral dentro de los municipios.
Con esta decisión la Generalitat mantiene una de las restricciones sobre la que había tenido más presión en los últimos días. El sector hostelero reclama un plan de desescalada que les permitiese comenzar a abrir espacios como las terrazas desde este mismo sábado e incluso la conselleria de Empresa, en manos de JxCat, avaló ir rebajando las restricciones en este sector. A esto se sumó la petición de los alcaldes metropolitanos del PSC, que también enviaron una carta al Govern pidiendo que se permitieran paulatinamente la vuelta a la actividad del sector.
Pese a esto, los titulares de Salut e Interior, que componen el Procicat, han optado por mantener el cierre total de la hostelería y la cultura. El pasado lunes la consellera Alba Vergés ya avanzó que pese a que el ritmo de contagios había descendido en Catalunya, esa mejoría no se había trasladado a la presión asistencia y en las UCI, que continuaba siendo demasiado alta.
También el vicepresident Pere Aragonès dejó entrever este miércoles su apuesta por mantener las restricciones por el momento. “Reino Unido, Alemania, Francia o Italia están tomando decisiones prácticamente calcadas a las del Govern”, afirmó. “No es un capricho tomar decisiones impopulares y con tanta afectación por la ciudadanía. Se toman por sentido de la responsabilidad y con el único objetivo de salvar vidas”.
El Procicat, que ha acordado mantener el resto de restricciones en vigor, incluyendo la de los equipamientos deportivos y gimnasios.