Una repentina decisión del grupo del PP en la Diputación de Barcelona ha evitado, este jueves, que CiU perdiera una votación en la que se instaba a la dirección de la Xarxa Audiovisual Local (XAL) a readmitir a los 15 trabajadores despedidos el pasado mes de junio. El consejero delegado de la XAL, Francesc Pena, había advertido que si se le obligaba a readmitir a esas personas se sentiría desautorizado y dimitiría de su cargo. De producirse la dimisión, CiU sólo podría optar a elegir un sustituto de su confianza con el apoyo del PP, lo que hubiera sido bastante difícil dado el enfrentamiento actual entre ambos grupos políticos. Por ello el control de la dirección de la XAL por parte de CiU pendía de un hilo.
Pero finalmente los seis diputados del PP han decantado la balanza a favor de los intereses de Convergencia, aunque sea de forma provisional, ya que en septiembre se volverá a plantear la misma cuestión.
La Diputación celebraba un Pleno, previo al ordinario, que en principio estaba convocado para debatir la readmisión de los 15 trabajadores despedidos el pasado 19 de junio. Pero la propuesta de PSC e ICV para que se procediera a la readmisión de los trabajadores ha quedado bloqueada por la oposición conjunta de CiU, ERC y el PP.
Hace un mes, PSC e ICV presentaron una moción con esta petición y la del cese del consejero delegado de la XAL, Francesc Pena, pero entonces CiU logró una prórroga de un mes para encontrar una salida de compromiso, al verse en minoría después de que el PP anunciara que se abstendría. Un mes después, CiU ha conseguido que los 6 diputados del PP votaran en contra de la tramitación de la misma moción en la que se abstuvieron hace cuatro semanas.
Los diputados del PSC y de ICV no saben qué han obtenido los populares a cambio de este giro en el sentido de su voto. El apoyo de los dos diputados de ERC, por su parte, no ha sido ninguna sorpresa, visto el apoyo de la formación a CiU en los últimos meses.
La moción no ha llegado a votarse porque el presidente de la Diputación, Salvador Esteve, ha pedido una previa sobre la idoneidad de la propia votación. Los grupos políticos no se han definido, por tanto, sobre si había que readmitir a los trabajadores despedidos sino sobre si era urgente o no debatirlo hoy. Al no considerarse urgente, el tema queda aparcado hasta después de las vacaciones.
Los portavoces de los grupos de la oposición -Pilar Díaz (PSC) y Arnau Funes (ICV)- han mostrado su sorpresa porque en el Pleno no se ha debatido lo que se había pactado hace un mes sino un informe que ha presentado el consejero delegado cuestionado, Francesc Pena, sobre la marcha de la XAL. Ambos grupos estudian pedir a los servicios jurídicos de la Diputación una explicación del porqué de este comportamiento y si es válida la reunión celebrada hoy. La presidencia de la Diputación había hecho llegar una comunicación a los quince trabajadores despedidos anunciándoles la celebración de esta Junta Extraordinaria. En este comunicado, se recordaba que el primer punto de la moción que había que discutir hoy era “revisar la decisión del Consejero Delegado y tratar la posible reincorporación de los trabajadores y trabajadoras”. Este debate es el que no se ha producido.
La intervención inicial del portavoz del grupo del PP, Alberto Villagrasa, no hacía prever su sentido final del voto, ya que se ha mostrado muy duro con la manera como se dirige la XAL y ha acusado a los directores de sectarismo ideológico. También ha recordado que antes de las 15 personas despedidas el 19 de junio se habían producido otros despidos como los de Sergi Mas o Pablo Planas, jefe de informativos nombrado a instancias del PP cuando el pacto CiU-PP obtuvo mayoría en la Diputación de Barcelona.
La rotura entre CiU y PP en la Diputación de Barcelona, ​​que supuso el cese de los políticos del PP con responsabilidades de Gobierno en la corporación provincial, o el alejamiento de las dos formaciones políticas, que se ha vuelto a poner de manifiesto este Jueves en el Pleno que se ha celebrado tras la Junta Extraordinaria de la XAL (en debatirse una moción sobre “El derecho a decidir”), no ha sido obstáculo para que los populares hayan dado aire a la dirección actual de la red.
Queda por ver ahora si el acuerdo que ha llevado al PP a desdecirse de su posición de hace un mes es circunstancial o se mantendrá el resto de la legislatura. Depende, entre otras cosas, la continuidad de Francisco Pena como consejero delegado de la XAL.