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Opinión - Ni liderazgo ni autoridad. Por Esther Palomera

Cerca de 1500 personas encadenan el hospital Vall d'Hebron en contra de las privatizaciones sanitarias

Los organizadores de la III Cadena Humana en el hospital Vall d'Hebron hablan de éxito y marchan contentos a casa. Alrededor de 1.500 personas, según los impulsores de esta acción, han rodeado todo el centro hospitalario, el más grande en Catalunya, cogidos de la mano y formando una cadena en defensa de los hospitales y centros de atención primaria públicos.

Ha sido la cadena humana con más éxito de las tres que se han celebrado hasta ahora, y que ha acabado, como es habitual, con la lectura del manifiesto elaborado por la Coordinadora d'Entidades de la SAP Montanya, al frente de esta acción, a las puertas del centro municipal de deportes de la Vall d'Hebron. Hablan de primavera caliente y se siguen quejando de los recortes, el cierre de servicios y plantas, el aumento de listas de espera, los colapsos de urgencias o la privatización del sector sanitario. Una privatización, que según los organizadores, ha ido en aumento. En 2014, dicen, se han derivado 1.000 pacientes de la Vall d'Hebron en hospitales concertados con ánimo de lucro.

Por todas estas razones los portavoces han pedido “la dimisión del gobierno de la Generalitat” y que los ciudadanos, aprovechando las elecciones que vienen, pongan “las instituciones, ayuntamientos y gobiernos al servicio del pueblo y de la gente y no de los intereses y el capital”.

Cantando los lemas habituales “No, no y no a la privatización” o “La sanidad no se vende se defiende”, han salido esta mañana los vecinos de Sant Andreu y los de Nou Barris caminando hasta encontrarse a las puertas del hospital donde, hacia las 12 del mediodía, ya los esperaban los vecinos de Vall de Hebron para formar esta cadena humana.

En 2012 se organizó la primera acción en torno a este hospital en contra de los recortes que estaba aplicando el gobierno de Artur Mas, y que conllevaron el cierre de camas y quirófanos durante los meses de verano. En la primavera de 2013 se volvían a reunir para formar la segunda cadena humana en contra del aumento de recortes, la precariedad laboral y las largas listas de espera.

En esta tercera ocasión, y ahora ya con un plan de propuestas elaborado por entidades y plataformas organizadas bajo la Marea Blanca Catalunya, con el nombre “queremos decidir sobre la Salud y el Sistema Sanitario de Cataluña”, han reclamado al gobierno que devuelva “los 1.600 millones de euros” que ha recortado desde que comenzó a aplicar las medidas de austeridad.

“Por una sanidad pública y de calidad”, “¿Artur Mas en qué mutua vas?” O “Boi Ruiz dimisión” son algunas de las reivindicaciones que se podían leer esta mañana en las pancartas de los manifestantes, que una vez más, salían con batas blancas o camisetas con mensajes reivindicativos, exigiendo un verdadero Servicio Nacional de Salud catalán público, de calidad, universal y sin corrupción.

Los organizadores de la III Cadena Humana en el hospital Vall d'Hebron hablan de éxito y marchan contentos a casa. Alrededor de 1.500 personas, según los impulsores de esta acción, han rodeado todo el centro hospitalario, el más grande en Catalunya, cogidos de la mano y formando una cadena en defensa de los hospitales y centros de atención primaria públicos.

Ha sido la cadena humana con más éxito de las tres que se han celebrado hasta ahora, y que ha acabado, como es habitual, con la lectura del manifiesto elaborado por la Coordinadora d'Entidades de la SAP Montanya, al frente de esta acción, a las puertas del centro municipal de deportes de la Vall d'Hebron. Hablan de primavera caliente y se siguen quejando de los recortes, el cierre de servicios y plantas, el aumento de listas de espera, los colapsos de urgencias o la privatización del sector sanitario. Una privatización, que según los organizadores, ha ido en aumento. En 2014, dicen, se han derivado 1.000 pacientes de la Vall d'Hebron en hospitales concertados con ánimo de lucro.