El Diari del Treball es un blog con voluntad de reflejar, tanto desde la información como la opinión, la lucha por preservar los derechos laborales y económicos que la crisis pone ahora en peligro. El blog está coordinado por el periodista Tomeu Ferrer.
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Los sindicatos de CatalunyaCaixa han decidido convocar una hora de huelga en todos los centros de la empresa los días 13, 17 y 19 de septiembre. Es la primera respuesta de los trabajadores a la presentación formal del ERE por parte de la dirección de la entidad bancaria. Este lunes finalmente CatalunyaCaixa ha comunicado oficialmente la presentación del Expediente de Regulación de Empleo que supondrá una reducción de aproximadamente el 30% de la plantilla. Después de casi un mes de contactos entre representantes de la dirección y los sindicatos, la posición de la empresa se ​​ha movido muy poco: Catalunya Caixa prevé ahora deshacerse de 2.395 personas en lugar de los 2.453 anunciados hace unos días. y lo hará aplicando expedientes de extinción de empleo.
Si en los próximos 30 días no se produce ningún acercamiento, el gobierno español, propietario a través del Fondo de Reordenación Ordenada Bancaria (FROB) del capital de la antigua caja de ahorros, impondrá las condiciones más duras aplicadas en la reestructuración de una entidad de este sector. Los que sean despedidos cobrarán un máximo de 22 días por año con un límite de 18 mensualidades. Estos datos suponen un leve movimiento en la propuesta inicial, que era de 20 días por año con 12 meses como límite máximo, tal como marca la última reforma laboral aprobada con los votos de PP y CiU.
Reducción salarial
Los empleados que no sean afectados por el recorte de plantilla sufrirán una reducción importante de sus condiciones salariales y laborales. Además, como resultado de la última normativa que penaliza las prejubilaciones, todos los despidos se harán a personas que no hayan cumplido los 50 años, lo que para los sindicatos supone un mayor endurecimiento del castigo.
Los sindicatos presentes en la negociación (CCOO, SEC y UGT) consideran que la reestructuración debería hacerse a partir de medidas no traumáticas como un plan de prejubilaciones y en un plazo que terminara el 2015, fecha en que la Unión Europea ha fijado el límite máximo para realizar las reestructuraciones de la banca nacionalizada en España.
CatalunyaCaixa se encuentra en el centro del huracán, porque además de las dificultades que conlleva la reestructuración, su anterior dirección se enfrenta a una solicitud de imputaciones por parte de la Fiscalía Anticorrupción debido al aumento salarial que se otorgaron los miembros del consejo justo cuando acababa de ser rescatada la entidad. En este sentido, la entidad Ausbanc ha pedido ser aceptada como acusación particular en el proceso judicial y que tendría como personas protagonistas, entre otros, al anterior presidente, Narcís Serra, y al anterior director general, Adolf Todó.
Los sindicatos de CatalunyaCaixa han decidido convocar una hora de huelga en todos los centros de la empresa los días 13, 17 y 19 de septiembre. Es la primera respuesta de los trabajadores a la presentación formal del ERE por parte de la dirección de la entidad bancaria. Este lunes finalmente CatalunyaCaixa ha comunicado oficialmente la presentación del Expediente de Regulación de Empleo que supondrá una reducción de aproximadamente el 30% de la plantilla. Después de casi un mes de contactos entre representantes de la dirección y los sindicatos, la posición de la empresa se ​​ha movido muy poco: Catalunya Caixa prevé ahora deshacerse de 2.395 personas en lugar de los 2.453 anunciados hace unos días. y lo hará aplicando expedientes de extinción de empleo.
Si en los próximos 30 días no se produce ningún acercamiento, el gobierno español, propietario a través del Fondo de Reordenación Ordenada Bancaria (FROB) del capital de la antigua caja de ahorros, impondrá las condiciones más duras aplicadas en la reestructuración de una entidad de este sector. Los que sean despedidos cobrarán un máximo de 22 días por año con un límite de 18 mensualidades. Estos datos suponen un leve movimiento en la propuesta inicial, que era de 20 días por año con 12 meses como límite máximo, tal como marca la última reforma laboral aprobada con los votos de PP y CiU.