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Una encuesta encargada por los comuns muestra una pugna entre Trias y Colau por el primer puesto en Barcelona

Xavier Trias y Ada Colau, tras el almuerzo que compartieron en enero

Pau Rodríguez

3 de marzo de 2023 08:35 h

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La carrera hacia la alcaldía de Barcelona sigue ajustada y una nueva encuesta, esta vez encargada por Barcelona en Comú a Ipsos, muestra una pugna por el primer puesto entre el líder de Junts, Xavier Trias, y la actual alcaldesa, Ada Colau, seguidos a un poco más de distancia por el socialista Jaume Collboni. La ERC de Ernest Maragall, que ganó los comicios en 2019, quedaría descabalgada. 

La fotografía que arroja el sondeo de Ipsos, hecho a partir de 1.000 entrevistas entre el pasado 6 y 10 de febrero, es la de una ajustada pelea por el primer puesto entre Trias y Colau. El primero, el exalcalde convergente que con su regreso ha sacudido el tablero municipal, con una estimación de voto del 23,5. La segunda, solo un punto por debajo, con un 22,5. En cambio Collboni quedaría a casi tres puntos, con 19,7.

En cuanto al número de concejales, se traduciría en 11 para Junts, 10 para Colau y 9 para el PSC. La sorpresa, ya apuntada en anteriores encuestas, es la caída de ERC, que aparece con una estimación de voto de 11,5 y cinco ediles. Su desplome desde los 10 concejales aparece inversamente proporcional al crecimiento de los posconvergentes, que con Elsa Artadi al frente lograron en 2015 sólo cinco. 

Según los datos de la muestra, a la que ha tenido acceso elDiario.es, a los republicanos les seguirían el PP, con una estimación de 7,5 y tres concejales, y Vox, que irrumpiría por primera vez en el Ayuntamiento también con tres ediles (y estimación de 6,3). Ciudadanos desaparecería, igual que Valents (el partido de una concejal de Manuel Valls). La CUP, por su parte, no lograría volver al consistorio. 

El resultado de estas entrevistas favorece la estrategia de Trias y de Colau, que desde que arrancó la maquinaria electoral han defendido que esta será una contienda entre ambas formaciones, partidarias de dos modelos de ciudad opuestos.

Sin embargo, el PSC no anda lejos. En la anterior encuesta elaborada por Ipsos, esta para La Vanguardia, la victoria de Trias era más clara, pero la distancia entre el PSC y Barcelona en Comú era mucho más reducida. Esto fue antes de que el candidato socialista abandonara el gobierno municipal para centrarse en su candidatura. 

La batalla a dos se mantiene cuando se pregunta a los encuestados sobre quién querrían que obtuviese la alcaldía de entre todos los aspirantes. Colau y Trias se llevan el 21%, respectivamente, mientras que Maragall se queda en un 10% y Collboni, en un 9%.

El sondeo aborda también las opciones de pactos postelectorales, una pregunta que los alcaldables siempre tienden a rehuir. Si Colau logra reeditar por tercera vez la alcaldía, el 64% de sus votantes –en base al recuerdo de voto de 2019– preferiría una coalición con partidos de izquierdas (por un 32% que apostaría por un gobierno de mayoría absoluta). Ante la misma pregunta, algunos datos interesantes son los que hacen referencia a ERC: el 35% querrían gobierno de izquierdas, por encima del 31% que se decantaría por uno de formaciones independentistas y un 30%, en solitario.

El electorado del PSC, por su parte, ante la victoria de Collboni preferiría un gobierno con mayoría absoluta (52%), seguido de un pacto de izquierdas (34%) y muy lejos de un acuerdo con Junts (11%). Tampoco la 'sociovergencia' seduce a los votantes de Junts en los últimos comicios, que si tuviesen que escoger lo harían por gobernar con mayoría absoluta (49%) o con otros independentistas (42%), pero muy minoritariamente con el PSC (9%). 

El encargo de Barcelona en Comú a Ipsos reserva una última pregunta para el plan urbanístico estrella de Colau, las peatonalizaciones de varios ejes del Eixample que su gobierno ha bautizado como ‘Supermanzana Barcelona’. Los favorables, el 52%, se imponen a los detractores, el 45%, aunque por una ventaja ligera. El apoyo al plan es abrumador entre los votantes de los comuns (el 84%), pero minoritario entre los demás. Lo apoyan el 39% del electorado de ERC y el 42% del del PSC. En este sentido, incluso en Junts convence a casi uno de cada tres votantes.

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