La epidemia de coronavirus empeora en Catalunya. A la espera todavía de que influya en los contagios el puente de la semana pasada, la velocidad de contagios, el indicador RT, ha superado el 1. Este era uno de los umbrales que fijó la Generalitat no para frenar la desescalada, sino directamente para retroceder.
En las últimas horas Catalunya ha registrado 1.886 nuevos contagios, con un riesgo de rebrote al alza y una incidencia acumulada que ha subido a 211,77 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días. En el hospital hay 1.511 pacientes de COVID-19, ocho menos que el lunes, y 351 ingresados en la UCI.
El empeoramiento de los datos obligará a la Generalitat a reevaluar su plan de desescalada a diez días de la Navidad, cuando se prevén excepciones para la movilidad y las reuniones. Ahora mismo Catalunya está en una fase 1 de reapertura pero con muchos elementos de la 2, como la apertura de los centros comerciales o la movilidad de fin de semana dentro de una comarca.
Con la RT por encima de 1 (en 1,11), se supera uno de los dos umbrales para retroceder en la desescalada, según las propias previsiones de la Generalitat, aunque estas precisaban que el indicador debía ser sostenido en el tiempo. El otro valor a tener en cuenta es el de los ingresos hospitalarios, que este martes han bajado pero que en domingo y lunes subieron significativamente, con 54 y 77 nuevos pacientes, respectivamente.
La consellera de Salud, Alba Vergés, reclamó el lunes “máxima prudencia” a la población antes de la Navidad e insistió en pedir que no se celebren “encuentros de empresas o de amigos para desearse buenas fiestas”. De cara a los días 24 o 25, advirtió que todas las medidas pueden modificarse, pero que en principio se mantendrá la posibilidad de reunirse 10 personas con un toque de queda reducido y más movilidad.