La situación epidemiológica en Catalunya está en un punto decisivo. Tras alcanzar el pico de contagios a mediados de enero, los casos habían ido cayendo sostenidamente hasta que la semana pasada ese ritmo de bajada se frenó. Como consecuencia de ello, el Departamento de Salud decidió mantener la mayor parte de las actuales restricciones. Pero en los últimos días varios indicadores están dando la señal de que el virus se podría volver a descontrolar.
El riesgo de rebrote, un valor que calcula Salud a partir de varios indicadores, lleva subiendo en los últimos dos días: de 261 puntos el domingo ha crecido hasta los 268. La RT, por su parte, también está aumentando desde hace varias jornadas. Este martes se situaba en el 0,99. Este indicador sirve para estimar a cuántas personas infecta cada positivo. Si la cifra supera el 1 –ahora está a las puertas– significa que el virus empieza a descontrolarse.
El mantenimiento de las restricciones actuales una semana más, hasta el 28 de febrero, fue el primer reconocimiento por parte de la Generalitat de que el cambio de tendencia les estaba preocupando. Este jueves el Procicat –el ente que gestiona la pandemia– volverá a revisarlas, pero la consellera de Salud, Alba Vergés, ya advirtió del “momento frágil” en que se encuentra la epidemia en Catalunya.
En una entrevista en TV3, Vergés advirtió que una cuarta ola, sin haber podido liberar las UCI de su actual presión asistencial, sería “dramática” para los profesionales hospitalarios. En estos momentos hay 1.973 pacientes ingresados por coronavirus, de los cuales 593 están en cuidados intensivos. Cabe recordar que a partir de 500 pacientes en UCI se considera que las desprogramaciones de operaciones no urgentes son ya “generalizadas”.
El otro indicador que está al alza en Catalunya es el de la positividad. Si la OMS recomienda que el porcentaje de contagiados sobre el total de pruebas realizadas se quede por debajo del 5%, algo que llevaba sucediendo desde la semana del 6 de febrero, ahora ha vuelto a superar esta cifra y se sitúa en 5,43%.
Todos estos indicadores no implican que estén subiendo a día de hoy los contagios, pero sí advierten de un cambio de tendencia en el descenso que puede derivar en un nuevo crecimiento de la epidemia. A nivel de positivos reportados, se ha pasado de 15.813 en la semana del 30 de enero a 11.274 la del 6 de febrero y 10.077 en la del 13. Esto quiere decir que pasó de caer un 28% a un 10%. Además, se ha desplomado el ritmo de pruebas PCR y antígenos. De las últimas dos semanas citadas, se ha pasado de hacer 295.093 tests –sumando ambos tipos– a 208.996, es decir, un 29% menos.