El líder del PSC en Barcelona, Jaume Collboni, deja su cargo como teniente de alcalde en el Ayuntamiento para poder centrarse en las elecciones municipales de mayo, según ha avanzado La Ser. En una comparecencia ante la prensa, Collboni ha asegurado que realiza este paso para centrarse “en exclusiva” en su candidatura a la alcaldía.
“Quiero construir una candidatura sólida, ilusionante y de mayoría. Trabajaré para volver al Ayuntamiento, pero como nuevo alcalde”, ha dicho Collboni, quien ha asegurado que esta campaña que prepara requiere que la haga “desde la máxima libertad”. Así, para “evitar tensiones en el consistorio”, renuncia a sus cargos como concejal y teniente de alcalde.
La renuncia de Collboni será efectiva el 1 de febrero y ya ha comunicado a la alcaldesa su decisión esta mañana, a través de un Whatsapp. También ha explicado que su cargo lo ocupará Laia Bonet, tercera teniente de alcalde. Así mismo, ha asegurado que su gesto no implica que se rompa el pacto de gobierno con Ada Colau, al menos no desde el PSC.
En esta línea, se muestra confiado de que BComú tampoco romperá el pacto. “Los acuerdos de gobernabilidad no son nominales, así que doy por sentado que se mantienen los acuerdos y se respetarán los espacios acordados”.
Este gesto se da ahora porque “las grandes decisiones de este mandato ya han sido tomadas, ahora estamos en velocidad de crucero”, pero eso no implica que el resto de ediles socialistas dejen sus atribuciones. La siguiente de la lista del PSC, Núria Carmona, será quien entrará como concejala en el Ayuntamiento pero, en principio, no asumirá responsabilidades en el gobierno local.
Con todo, Collboni se prepara para encarar una campaña electoral desde la oposición frontal a la gestión de Colau, sin las contradicciones que le supondría el hecho de conformar gobierno con la alcaldesa a la que quiere rebocar. “Voy a por todas a por Barcelona”, ha dicho el socialista.
Esta decisión se ha tomado tras diversos desencuentros entre Collboni y Colau, como es la oposición que los socialistas han mostrado hacia uno de los proyectos estrella del consistorio, como las superillas, promoviendo una moción para que no se puedan proyectar más en lo que queda de mandato.
Otras cuestiones, como la ampliación del Aeropuerto que defiende Collboni y a la que Colau se opone, han marcado toda la legislatura, aunque el pacto sigue vigente.
Reacciones en el consistorio
Las reacciones a la decisión de Collboni no se han hecho esperar. Desde los comuns, el sexto teniente de alcalde, Jordi Martí, ha calificado el gesto de “irresponsable y poco creíble”. El partido de Ada Colau ha criticado que el socialista abandone su cargo “en el gobierno del cual ha formado parte durante cuatro años” para hacer campaña.
El de BComú ha vinculado la decisión del socialista a los resultados de la última encuesta publicada sobre las elecciones municipales, que sitúan al PSC en la carrera para la alcaldía, disputada reñidamente entre Colau, Collboni y Trias. “Los nervios de la última encuesta juegan malas pasadas”, ha sentenciado Martí.
Por su parte, desde ERC, Ernest Maragall ha visto la decisión de Collboni como “una manera desesperada de intentar quitarse de encima las responsabilidades que ha compartido durante estos cuatro años [con Ada Colau]”. El líder de la oposición en Barcelona también ha apuntado que la renuncia de Collboni “parece una necesidad de afirmar su distancia con aquello que ha construido y decidido él mismos”.
Desde Junts, el alcaldable Xavier Trias ha calificado el gesto de Collboni de “poco serio” que demuestra el “fracaso espectacular de este ejecutivo”. Trias se ha reconocido sorprendido por la decisión del socialista y le ha criticado una decisión para querer desmarcarse de la política de Colau cuando lleva cuatro años gobernando con ella.
Preguntado sobre estas reacciones, Collboni ha querido responder a sus contrincantes “con una sonrisa y una llamada a la calma. Haremos las cosas bien hechas y por responsabilidad y respeto institucional, esta era la decisión que tenía que tomar”.