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La jueza imputa al hijo de Negreira y amplía la causa al delito de blanqueo de capitales

Novedades en el caso Negreira. La jueza de Barcelona que investiga los pagos del F.C. Barcelona al exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros ha decidido imputar al hijo del excolegiado, Javier Enríquez, que también cobró del club a través de un exdirectivo, así como ampliar la investigación al delito de blanqueo de capitales (intentar aflorar el dinero obtenido de una actividad ilegal).

No hay dos sin tres. En una providencia, la magistrada también informa que ha decretado el secreto de actuaciones en la investigación, lo que resulta relevante porque a partir de ahora los avances de las pesquisas solo los conocerán la propia jueza y los fiscales. Las defensas no tendrán acceso a la causa hasta que levante el secreto.

Habitualmente, el secreto de la causa se decreta cuando el juez o jueza ve indicios delictivos de relevancia y precisa de la reserva para obtener las pruebas necesarias para el buen fin de la investigación, lo que en ocasiones puede implicar limitaciones de los derechos fundamentales.

Por ahora, el caso Negreria tiene como investigados a los expresidentes del F.C. Barcelona Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, los exdirectivos Albert Soler y Óscar Grau y el antiguo árbitro Enríquez Negreira. Ahora suma a su hijo, algo que en un principio no quería la Fiscalía, que pidió que Javier Enríquez declarara como testigo –y, por lo tanto, con obligación de decir verdad–. Uno de los testimonios clave de Anticorrupción pasa a ser investigado.

El caso Negreira es también una cuestión familiar. Según se desprende de la investigación de Hacienda, el Barça pagó a las empresas tanto de José María Enríquez Negreria, exvicepresidente del CTA, como de su hijo, Javier Enríquez. Los pagos al padre, que suman 7,3 millones entre 2001 y 2018, no se encuentran amparados en ningún contrato, según reconoció el propio Barça. Respecto al hijo, en la relación comercial ejerció de intermediario –comisionista, según los investigadores– el exdirectivo de Núñez, Bartomeu y Rosell Josep Contreras, fallecido el pasado diciembre.

La Fiscalía no incluyó a Javier Enríquez en su querella al considerar que los trabajos de asesoramiento arbitral que realizó para el Barça sí están justificados y debidamente documentados, al contrario que los de su padre. Y a diferencia de su padre, Enríquez no retiró en efectivo ni un solo euro tras las transferencias del club. El exárbitro en cambio sacó alrededor de medio millón de euros, que según su versión usaba para los gastos del día. En todo ese tiempo no incrementó su patrimonio.