Revolcón de la Audiencia de Barcelona a la sentencia que hace justo un año prohibió a Lidl seguir vendiendo su robot de cocina Monsieur Cuisine. Los magistrados que han revisado la sentencia del juez de lo Mercantil que juzgó en primera instancia el caso descartan que el robot de cocina vulnere la patente de Thermomix, lo que permitirá a Lidl volver a comercializar la máquina.
El litigio se centraba en el presunto plagio de la Thermomix por parte de Lidl que alegaba Vorwerk, el grupo fabricante de la máquina. Lidl mantenía que su robot de cocina no infringía los derechos de Thermomix, y de hecho formuló una contrademanda para que el juez anulara la patente de Vorwerk por “falta de novedad” respecto a máquinas similares de otras marcas comercializadas antes que el Monsieur Cuisine, algo que descartó el juez pero que ahora sí estiman los magistrados de la sección 15ª de la Audiencia de Barcelona.
El robot de cocina de Lidl tiene funciones similares a la Thermomix, y la mayor diferencia está en el precio: cuesta hasta casi tres veces menos. Las implicaciones económicas del pleito podrían ser millonarias: Thermomix reclamaba al supermercado una indemnización equivalente al 10% de las ventas de Monsieur Cuisine, una cantidad total que no está calculada. El caso no está cerrado, pues Thermomix tiene la opción de recurrir ante el Tribunal Supremo.
Los magistrados de la Audiencia de Barcelona concluyen que “no existe infracción” en el Monsieur Cuisine de la patente de la Thermomix. Descartan los jueces que Lidl copiara a Thermomix la función para pesar los alimentos mientras la propia máquina los cocina y la opción que impide añadir más alimentos mientras el vaso de agitación del robot está en funcionamiento, característica pensada para evitar accidentes.
En el robot de cocina de Lidl, remarca la sentencia, la tapa se puede abrir “sin necesidad de detener previamente el mecanismo agitador”, tal y como sí sucede en la Thermomix. La tapa del Monsieur Cuisine solo se abre “por medio de un pequeño giro sobre su eje que determina la detención del mecanismo agitador, si bien no de forma inmediata”, zanja la sentencia. Es decir, que Monsieur Cuisine no copia la Thermomix porque no es tan segura.
Tampoco cree el tribunal que Lidl infringiera la patente de la Thermomix respecto a la opción de pesar los alimentos. El motivo es que en la patente de Vorwerk “no aparece descrito” el dispositivo de pesada controlado por la misma tarjeta que aloja el resto de circuitos correspondientes a las distintas funciones de la máquina. “Si realmente la patente permite esta ventaja técnica, lo razonable es que lo hubiera explicitado, y no lo ha hecho”, afean los jueces a Vorwerk.
No es la primera vez que Thermomix lleva a los juzgados a un competidor. En 2013 el Tribunal Supremo ya descartó que el fabricante español Taurus vulnerara la patente de Thermomix con su robot de cocina MyCook. Con el antecedente desfavorable para Thermomix, ahora el Alto Tribunal también tendrá que pronunciarse sobre Monsieur Cuisine. Mientras no llegue la sentencia definitiva Lidl podrá volver a vender uno de sus productos estrella.