Las lluvias de esta Semana Santa han permitido que los embalses del sistema Ter-Llobregat aumenten sus reservas casi hasta el 17%, con un total de 103,59 hectómetros cúbicos embalsados. De esta manera, han llegado a superar el lindar fijado por el Plan Especial de Sequía, que fija el estado de emergencia cuando se desciende de los 100 hectómetros.
Aun así, el Govern ha dejado claro que para salir de esta fase hay que estudiar el contexto más allá de conseguir un determinado volumen de agua. De esta manera, todavía no hay fecha para salir de la emergencia por sequía, que fue declarada el pasado 1 de febrero.
El sistema Ter-Llobregat está formado por los embalses de Sau, Susqueda, la Baells, la Llosa del Cavall y Sant Ponç. En los últimos días todos han aumentado el volumen de agua, siendo el de Susqueda el que más se ha recuperado. El más vacío sigue siendo el de Sau, con sólo el 4,73% de su capacidad.
Las fase de emergencia también está declarada desde septiembre en el embalse de Darnius Boadella. Este lunes estaba al 11,64% y en después de las últimas lluvias a penas ha llegado al 11,68%.
En lo relativo a los embalses de la Conca de l'Ebre, que dependen de la Confederación Hidrográfica de l'Ebre (CHE), están a una media del 47,43% de su capacidad.