Más de la mitad de todas las camas de UCI que hay en Catalunya están hoy ocupadas por un paciente de coronavirus, una situación que no se daba desde los meses de mayo y abril y resultado de una segunda ola que ha impactado de lleno en los hospitales desde hace semanas. Solo en esta comunidad, hay 447 pacientes ingresados en estado crítico.
Así lo han detallado este viernes en rueda de prensa el secretario general del Departamento de Salud, Marc Ramentol, y el director de la Unidad de Seguimiento de la COVID-19 en Catalunya, Jacobo Mendioroza. Este último ha indicado que los datos de los tres últimos días apuntan a que “se está ralentizando un poco el ritmo de contagio” debido a las medidas adoptadas hace dos semanas –entre ellas, el cierre de bares y restaurantes–, pero aun así la situación epidemiológica sigue siendo “grave y preocupante”.
Ambos responsables sanitarios han pedido de nuevo que la población se conciencie y evite situaciones de potenciales contagios, además de seguir las instrucciones concretas de limpieza de manos, distancia social y mascarilla cubriendo la boca y la nariz. Este viernes ha entrado en vigor en Catalunya el confinamiento perimetral de toda la comunidad por 15 días, acompañado del cierre de los municipios en fin de semana y el cese de actividades culturales o extraescolares.
“Si este decrecimiento vuelve a subir tendrá que haber medidas más duras”, ha advertido el director de la Unidad COVID-19 en Catalunya, entre las que se podría encontrar el confinamiento domiciliario aunque éste “no tiene que ser igual que el de marzo”, ha apuntado el secretario del Departamento. A su juicio, “si llega el caso” en el se deba solicitar el confinamiento domiciliario, “la propuesta no sería la misma” que la que se tomó en la primera ola de la pandemia y, por ejemplo, las escuelas podrían permanecer abiertas, ha dicho.
Ramentol ha considerado que “necesitamos catorce días para tener claro el impacto” de las últimas restricciones impuestas, como el toque de queda nocturno y las anunciadas ayer, con confinamiento perimetral y municipal de fin de semana en toda Cataluña.El decrecimiento de los datos de la pandemia se observa en casi todas las regiones, excepto en Terres de l'Ebre, donde crecen los contagios, probablemente debido a los cribados masivos que se han hecho en escuelas e industrias en las últimas semanas, según ha explicado Mendioroz.
Esta tímida mejora aún no se nota en el ámbito asistencial, es decir, en la atención primaria y en los hospitales, y por primera vez desde la primavera los 447 enfermos de COVID-19 que ocupan las UCI suponen el 52% del total (887 pacientes COVID-19 y no COVID-19). Además, los pacientes con COVID-19 suponen el 20% de las urgencias que se atienden en la atención primaria, donde también han aumentado las sospechas de coronavirus atendidas en las últimas semanas.
Por lo que se refiere a las residencias geriátricas, se han confirmado 1.377 casos positivos, lo que supone el 2,5 % del total de personas residentes en estos centros, con una tendencia al alza similar a la que se registra en el resto de la sociedad. El 13% de las residencias de Cataluña han tenido un caso de COVID, que se considera un brote y supone el cribado del centro.