Dos neonazis han aceptado una pena de un año y tres meses de prisión, que no cumplirán si en dos años no delinquen y realizan un curso sobre igualdad, por llamar “pequeñas cucarachas” a un grupo de niños negros de Vic (Barcelona) y proferir insultos racistas contra otros vecinos del barrio, ataques que los propios acusados grabaron en vídeo.
Los dos acusados han llegado a un acuerdo con la Fiscalía de Delitos de Odio de Barcelona, que lidera el fiscal Miguel Ángel Aguilar, por el que reconocen los insultos y ataques racistas y aceptan una pena de prisión de un año y tres meses por un delito contra los derechos fundamentales así como una multa de 810 euros y la prohibición de trabajar como profesores o monitores los próximos cuatro años.
La sentencia de conformidad declara probado que los acusados, guiados por un “profundo desprecio y rechazo” hacia las personas inmigrantes y una voluntad de incitar a la violencia y el odio contra ellas, se grabaron en un barrio de Vic en julio de 2019 mientra proferían insultos y ataques racistas a los vecinos.
“Barrio de inmigrantes de otras razas, no diremos las respectivas razas porque dan un poco de asco y estamos limpiando las calles, lástima que no las podamos limpiar de otra manera, que ya nos gustaría”, aseguran los condenados al inicio del vídeo, para a renglón seguido proclamar: “Prueba de ello tenéis la asquerosidad que tenemos en este país, en este pueblo de Vic, todo es inmigrantes, todo es basura”.
A continuación, indica la sentencia, realizaron saludos nazis, como el 'Heil Hitler', y se acercaron a un parque infantil, donde al cruzarse con un grupo de niños de piel negra les espetaron “pequeñas cucarachas”. “Mucha cucaracha”, dijeron luego a dos hombres.
Los acusados también admiten que grabaron los vídeos, que fueron publicados por personas desconocidas, “para generar sentimientos de rechazo y animadversión” hacia los inmigrantes. Los vídeos se han retirado de Facebook pero no de las cuentas de Youtube de los medios de comunicación que los publicaron, en los que se ve a los acusados proferir insultos racistas tras retirar de las calles lazos amarillos de apoyo a los presos del procés.