Las plataformas de afectados por la hipoteca (PAH) catalanas ha conseguido este viernes una de sus pequeñas victorias tras ocupar durante toda la mañana una sucursal de CatalunyaCaixa. Los cerca de 400 activistas han propiciado con su acción que la entidad se aviniera a firmar una dación en pago para una familia de Sabadell -la madre sufre un cáncer terminal-, y que concediera una reunión el próximo jueves para dar salida los casos de cerca de 700 personas que no pueden pagar las hipotecas contraídas con CatalunyaCaixa, o que ya han sido desahuciadas y acumulan una deuda que difícilmente podrán pagar.
La familia de Sabadell -de cuatro miembros- que ha conseguido este viernes la dación en pago y un alquiler social vivía una situación precaria y dramática: la madre sufre un cáncer terminal, y hace tiempo que no pueden pagar la hipoteca con los pocos más de mil euros que ingresa mensualmente el padre, complementados con la pensión por enfermedad de su mujer. De una hipoteca de 300.000 euros les quedaban todavía veinte años para pagar.
“CatalunyaCaixa no firma daciones en pago totales, sino que hace quitas del 50% y la otra parte la pretende cobrar dando créditos personales a los afectados”, explica Mónica Guerrero, de la PAH Urgell, que añade que “esto no sirve para muchas familias que no tienen ingresos”. En este sentido, las demandas de la PAH son claras: conseguir que se eliminen los remanentes en las daciones, solucionar los casos de afectados de las diversas plataformas, y que la entitdad ofrezca alquileres sociales de cinco años con una cuota máxima del 30% de los ingresos de cada unidad familiar.
Las conversaciones con CatalunyaCaixa se enmarcan dentro de toda una serie de negociaciones que la plataforma mantiene abiertas con varias entidades financieras para encontrar salidas “concretas y efectivas” para los cientos de personas que no pueden pagar su hipoteca o alquiler, o que ya han perdido el piso y arrastran deudas impagables. “Algunas de estas entidades, lo único que hacen después de meses de negociación es dilatar las negociaciones sin ofrecer soluciones”, como en el caso de Catalunya Caixa, según un comunicado emitido por la PAH raíz de la acción.
Algunos de los concentrados han aprovechado para recordar las recientes comparecencias de los últimos dirigentes de la entidad en la comisión parlamentaria que investiga la gestión de las entidades financieras. Los expresidentes Narcís Serra o Adolf Todó han coincidido en las últimas semanas en eludir las responsabilidades por la situación actual de CatalunyaCaixa y han atribuido la intervención que ha sufrido la entidad a la crisis y el paro -en el caso de Serra- o a los anteriores gestores -en el caso de Todó-. De todos modos, lo que más enciende los ánimos de los activistas, según Guerrero, sigue siendo que “se trata de una entidad rescatada con dinero público; un banco que debería ser de toda la población”.
Nuevo intento de conseguir la dación del Banco Popular para el José Antonio
Tras ocupar la sucursal de CatalunyaCaixa, decenas de activistas de la PAH han decidido trasladarse hasta la sede del Banco Popular, en la Rambla de Barcelona, donde hace exactamente una semana la plataforma se encerró para pedir la dación en pago por el José Antonio, que hace años firmó una hipoteca multidivisa de 390.000 euros con la entidad y ahora debe más de 500.000, aunque haber pagado 100.000.
La ocupación aquella vez no obtuvo sus frutos, y los activistas, después de pasar todo el día en el vestíbulo del banco, fueron desalojados por los Mossos, en un operativo que terminó de madrugada.