ERC y Junts han conseguido que la mayoría del Parlament respalde la resolución que fija el precio para la investidura de Pedro Sánchez. Si el líder socialista quiere revalidar la presidencia deberá “trabajar para hacer efectivas las condiciones para la celebración del referéndum”, afirma el texto, que ha sido aprobado gracias a una abstención de última hora de la CUP y al que los socialistas se han opuesto frontalmente.
El registro de esta iniciativa el jueves, después de una complicada negociación entre ERC y Junts, ya fue respondido de forma coordinada por PSOE y PSC, que rechazaron de plano cualquier iniciativa encaminada a la autodeterminación por considerarlas “fuera de la Constitución”.
Por su parte, la portavoz de ERC, Marta Vilalta, ha asegurado en Catalunya Ràdio que su formación reclama un compromiso de Pedro Sánchez para negociar sobre el referéndum, aunque ha evitado poner líneas rojas a la investidura. Fuentes independentistas remarcan, sin embargo, que la redacción de la moción deja claro que lo que se exige a Sánchez es que facilite una negociación en la el independentismo pueda defender el referéndum, como la que ya existe en el marco de la mesa de diálogo, pero no que fije de antemano condiciones como el calendario o los términos de la votación.
Finalmente el Parlament ha aprobado este viernes las dos propuestas de resolución pactadas por los grupos independentistas, la ya citada para condicionar la investidura de Pedro Sánchez, pero también una segunda en la que la CUP ha figurado desde el inicio como promotora y a la que también se han sumado los comuns, que marca las condiciones de mínimos en una eventual ley de amnistía.
Esta segunda resolución defiende “la necesidad de una ley de amnistía para dejar sin efecto lo tipificado como infracción penal o administrativa, en relación a la defensa en el ejercicio del derecho a autodeterminación de Catalunya, e insta al Govern de la Generalitat y las instituciones catalanas a sumarse al esfuerzo colectivo por la aprobación de esta ley y a realizar un seguimiento proactivo de su aplicación de forma inmediata a su aprobación”, asegura el texto aprobado.
Esta misma resolución, que ha acabado recibiendo el voto afirmativo de una mayoría cualificada del pleno, reclama también que “en la tramitación de esta ley de amnistía se realizarán las acciones necesarias para que se incluyan todas las personas represaliadas por motivos políticos en esta causa y en defensa de derechos y libertades en el contexto de conflicto social y político con el Estado español”.
La mayoría parlamentaria ha optado en cambio por tumbar la propuesta con la que el PSC se posicionaba en torno a la cuestión nacional, una iniciativa que apostaba por “avanzar con coherencia, mediante el diálogo, por el camino del reencuentro, en el marco de la Constitución” y rechazaba “toda estrategia de confrontación, división y polarización”. Los socialistas registraron este texto a la vez que anunciaron que no darían apoyo a ninguna de las resoluciones que apostaban por la amnistía, ni siquiera a la que En Comú Podem registró por su cuenta y que no ligaba la ley de olvido penal a la autodeterminación.
Mismos apoyos a la amnistía en el Ayuntamiento de Barcelona
Al igual que ha ocurrido en el Parlament, también en el Ayuntamiento de Barcelona se ha votado este viernes una propuesta a favor de la amnistía presentada por Junts y ERC. Y ha salido adelante casi con los mismos apoyos a excepción de la CUP, que no tiene representación en el consistorio. Con el ‘sí’ de los comuns, el texto ha salido adelante con 26 de los 40 concejales en el plenario de la capital catalana.
El PSC del alcalde Jaume Collboni, siguiendo la línea del partido en el Parlament, ha votado en contra, lo mismo que PP y Vox. “Va en contra de la prudencia necesaria en este momento delicado. Hace falta discreción”, ha expresado la teniente de alcaldía socialista Laia Bonet, en referencia a las negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez entre el PSOE y las formaciones independentistas.
Por otro lado, se ha votado también una proposición del PP en sentido contrario, de oposición a la eventual amnistía. Pero no ha salido adelante al rechazarla todos los grupos excepto los propios populares, que han votado a favor, y Vox, que se ha abstenido.
El Parlament constata la falta de apoyos del Govern
Aunque todos los focos estaban puestos este viernes sobre las dos propuestas conjuntas de los independentistas, en esta misma sesión también se han aprobado hasta tres textos que, con diferentes matices, apuntaban a la debilidad parlamentaria del Govern. PSC, Junts y comuns habían registrado resoluciones en este sentido y las tres han acabado aprobándose gracias a los votos combinados de los tres y, en ocasiones, formaciones de la derecha.
En concreto, los socialistas cargan contra Pere Aragonès porque, un año después de la ruptura de su coalición de Gobierno, “persiste, e incluso se ha acentuado, la falta de confianza de la mayoría de la Cámara”. También Junts se expresa en términos similares cuando asegura que el Ejecutivo se encuentra “sin confianza ni apoyo parlamentario”. En Comú Podem, por su parte, ve a Aragonès sumido en una “faltad e liderazgo e iniciativa política”.
Estas resoluciones, que son un correctivo para el Govern, se suman al varapalo de haber podido aprobar menos de la mitad de las iniciativas presentadas como ERC. Fuentes del Ejecutivo quitan hierro a esta situación, que recuerdan que ya se ha dado durante todo el año pasado pese a lo que pudieron aprobar grandes leyes como los presupuestos.