Final descafeinado de la comisión de estudio del modelo policial catalán. La falta de acuerdo entre los grupos ha llevado al Parlament a rechazar tanto la prohibición total de las balas de 'foam' como la creación de un mecanismo de control independiente para los Mossos d'Esquadra similar al que tienen varios países anglosajones, tal y como reclamaban las entidades de defensa de derechos humanos.
Después de más de 22 sesiones y 100 comparecencias, las votaciones este viernes de las conclusiones de la comisión han dejado un “sabor agridulce” a Amnistía Internacional y el centro Irídia, tal y como ha expresado su codirectora, Anaïs Franquesa. Para Adriana Ribas, de AI, la creación de un mecanismo independiente de control era “un paso muy importante” en la rendición de cuentas de las actuaciones policiales, por lo que ha rechazado su veto parlamentario.
La comisión se ha comprometido a retirar “urgentemente” los proyectiles de 'foam' más lesivos, llamados SIR-X, pero no de forma total. Se estudiará la sustitución del 'foam' por otros medios potencialmente menos lesivos, si bien esta votación queda a la espera de que la conselleria de Interior, en manos de ERC, la ejecute, y los republicanos han tildado de “irresponsable” dejar a los Mossos sin este armamento mientras no se analiza una alternativa viable.
Solo la CUP y los comuns han apostado por la prohibición total del 'foam'. “Si hoy no lo prohibimos, la responsabilidad de las nuevas lesiones recaerá en los partidos que voten por mantener el 'foam'”, ha advertido Marc Parés, de los comuns, mientras Xavier Pellicer, de la CUP, ha criticado en especial que Junts haya vetado la creación del mecanismo de control independiente: “Quien no tiene nada que esconder no tiene miedo de enseñar y ser controlado”.
En suma, la policía catalana podrá seguir disparando 'foam' si bien no su proyectil más lesivo gracias a los votos de Junts, la CUP y comuns. ERC se ha abstenido y el resto de grupos ha votado en contra. La comisión también ha votado en contra de que los Mossos tengan un mecanismo de control independiente. Ha resultado decisivo el voto contrario de PSC y Junts.
En su intervención, el diputado de ERC Chakir el Homrani ha rechazado valorar la prohibición del 'foam' y ha abogado por una mirada “global” sobre el modelo policial. Ramon Espadaler (PSC-Units) ha defendido que Catalunya tiene un buen modelo de orden público, al tiempo que ha expresado su “confianza” en el cuerpo, por lo que ha rechazado la creación de un organismo externo de control.
En la misma línea, la diputada de Junts Jeannine Abella ha considerado innecesario ese tipo de organismo ya que “hay otras formas para controlar a los Mossos”, como reforzar la División de Asuntos Internos (DAI), que no obstante pertenece al propio cuerpo.
Por otro lado, la comisión también ha aprobado “prohibir las técnicas como las del 'carrusel'”, que consiste en conducir los furgones policiales de un punto hacia otro a gran velocidad repetidamente para dispersar o cercar a manifestantes, utilizadas por los Mossos d'Esquadra durante las manifestaciones.
La CUP también había propuesto en sus conclusiones finales suprimir las unidades del Área Regional de Recursos Operativos (Arro) y de la Brigada Móvil (Brimo) de la policía catalana, hecho que no ha generado consenso, y tampoco se ha aprobado fomentar “más rotación en las unidades de Brimo y Arro” como pedía ERC.