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El Parlament pedirá el referéndum al Congreso con el apoyo de tres diputados del PSC

El Parlament de Catalunya da un paso más hacia la consulta soberanista y aprueba pedir formalmente al Congreso que traspase a la Generalitat las competencias para convocar referendos, a través del artículo 150.2 de la Constitución. La petición han contado con el apoyo de 87 diputados -casi los dos tercios de la Cámara-, entre los cuales se encuentran tres diputados del ala soberanista del PSC, que ha roto la disciplina de voto de su partido -bajo amenaza de expulsión- y se han sumado a la mayoría que conforman CiU, ERC e ICV-EUiA -la CUP se ha abstenido. Los tres diputados, Joan Ignasi Elena, Marina Geli y Núria Ventura, han recibido la ovación de buena parte la Cámara.

Con la decisión acordada este jueves por el Parlament, se elevará una proposición de ley a la Cámara Baja para que ésta debata si traspasa la competencia a la Generalitat para convocar la consulta de autodeterminación mediante el articulo 150.2 de la Constitución Española, aunque el PP, con mayoría absoluta en el Congreso, ya ha asegurado que no la aceptará. En contra de pedir este traspaso se han posicionado PP, Ciutadans y la mayor parte del PSC.

La vía del 150.2 es una de las que el Consejo Asesor para la Transición Nacional -órgano asesor de la Generalitat para el proceso soberanista- contempla para poder celebrar la consulta en 2014. Los partidos que la respaldan han admitido que no prosperar, pero sostienen que llevar el debate al Congreso contribuirá a “cargar de razones” a los que defienden la consulta, porque visualizará el 'no' del Gobierno central.

Quiebra en el PSC

Quiebra en el PSCElena, Geli y Ventura, los diputados socialistas que han roto la disciplina de voto, no han sido los únicos que han mostrado sus discrepancias con la dirección. Ayer el alcalde de Lleida, Àngel Ros, dejó el escaño en el Parlament precisamente porque no quería votar lo contrario que su partido, y este jueves la diputada Rocío Martínez Sampere ha anunciado que, pese a votar no, dejaba su silla en la Ejecutiva del partido dadas las discrepancias. En la misma línea, Laia Bonet, que no es diputada pero sí miembro de la Ejecutiva, también ha abandonado su cargo en el partido.

Ahora habrá que ver si la dirección liderada por Pere Navarro cumple con su amenaza y expulsa a los tres díscolos, algo que, sin embargo, muchos cargos dentro del partido han pedido que no se lleve a cabo.