La presidenta del Parlament en la última legislatura y diputada electa por ERC, Carme Forcadell, no repetirá al frente de la institución catalana. Así lo ha anunciado Forcadell en una rueda de prensa en la que también ha hecho balance sobre sus dos años de presidencia. “Una legislatura corta”, ha descrito, “pero muy intensa”.
La diputada ha meditado largamente su papel en la nueva legislatura, aunque la decisión de abandonar la presidencia ya estaría tomada desde hace semanas. Los independentistas esperaban a su decisión porque, si ella lo deseaba, le reservaban el cargo. Forcadell sin embargo sí tiene previsto no dejar su acta de diputada e incorporarse a la actividad ordinaria de la Cámara.
La que fuera primero presidenta de la ANC y después presidenta del Parlament ha justificado su decisión por el que considera un “cierre de ciclo”. “Cuando asumí esta presidencia tenía claro de que sería por un periodo de tempo corto y excepcional”, ha explicado Forcadell, quien ha dejado ver el peso de las acusaciones penales sobre ella en su decisión cuando ha asegurado: “Creo que la presidencia del Parlament necesita ahora de una nueva figura, libre de procesos judiciales”.
“He actuado siempre con voluntad de respetar el derecho de iniciativa y a debatir de los diputados. He obrado en conciencia bajo la idea de que en un Parlamento se debe debatir libremente y antes de haber aceptado la censura hubiera dimitido”, ha explicado, tras agradecer a sus compañeros independentistas en la Mesa y a Joan Josep Nuet por compartir sus mismos valores.
La presidenta saliente de la Cámara está imputada por los delitos de rebelión y desobediencia, y se encuentra en libertad condicional tras pagar la fianza que le impuso el Tribunal Supremo. Entre los nombres que suenan con fuerza para sustituirla destaca el de Ernest Maragall, diputado electo de ERC esta legislatura, aunque no es el único diputado que se baraja.