Más de cinco millones de catalanes han sido llamados a las urnas el 1 de octubre para votar sobre la independencia de Catalunya. El decreto de convocatoria ha sido firmado este miércoles por el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, minutos después de que el Parlament aprobara la ley diseñada para dar cobertura a la votación y una vez ha sido publicada en el boletín oficial.
Finalmente el Govern ha podido aprobar el decreto antes de que el Constitucional suspendiera la ley, que era el objetivo que los independentistas perseguían con el procedimiento exprés que ha guiado el debate parlamentario de este miércoles. El president del Govern han firmado la convocatoria tras reunir al Govern, en busca de imagen coral. Tras lo que han salido a presentar el decreto al patio del Parlament.
El decreto ha tardado en llegar más de un año desde que fuera anunciado, pero su vigencia prevista se cuenta en días. El Gobierno presentará, previsiblemente, este mismo jueves ante el Constitucional varios recursos, con los que el tribunal suspenderá la ley y la convocatoria en cuanto los tome en consideración. Por su parte, el Govern catalán ha anunciado que no reconocerá esta suspensión y seguirá adelante con el referéndum.
Para llegar hasta aquí, la meta que se habían marcado, JxSí y la CUP han forzado el artículo 81.3 del Parlament para eliminar la mayoría de trámites parlamentarios habituales en la aprobación de la ley del referéndum. Esto ha conllevado la airada protesta de la oposición por lo que ha considerado una vulneración de sus derechos. Ciutadans, PSC, y PP han abandonado el hemiciclo durante la votación de la ley.