“El 15-M no es un aniversario”. Ya lo decían el año pasado, y este lo repiten, pero no deja de ser una fecha especial para el movimiento. “Es una fecha para recuperar la dimensión inclusiva y generalizada de las luchas contra la troika y las políticas de austeridad responsables del genocidio financiero”, dice en un comunicado un grupo de los activistas que estuvo en la plaza y dos años después ha venido a reencontrarse en lo que llaman Comité Disperso.
“Hemos atravesado la fase de la protesta y de la construcción de unas demandas, y hemos apelado a la clase política para que las tome en consideración mediante diferentes actuaciones: recogiendo firmas, ocupando las plazas, manifestándonos masivamente, practicando la desobediencia civil, etc”. Así valoran lo hecho hasta ahora, pero también esperan ir más allá: “Una vez definidas las propuestas, después de que algunas incluso hayan llegado al seno de las instituciones y sigan siendo ignoradas, es la hora de atacar a la corrupción y al capitalismo financiero no sólo de forma simbólica sino de manera material mediante prácticas concretas.”
Así plantean su “escrache al sistema”. Ayer empezaron las actividades de estos días con Toque a Bankia y seguirán con “travesuras” de Iaioflautas, acciones de la PAH, invitaciones a cerrar cuentas de bancos o a llevar la basura a sus puertas. Y con todo esto, volveran a la plaza. Desde este viernes se volverá a acampar en la plaza de Catalunya de Barcelona.
Durante el fin de semana se llevarán a cabo diversas charlas, para hablar de los problemas y las propuestas y alternativas. Mientras en 2011 la plaza se dividía en espacios con nombres como Tahrir o Islandia, este año el movimiento les pone el nombre de tres activistas que murieron desde el pasado 15-M: Sílvia Aros, Consol y Domènec, para llevarlos en el recuerdo y seguir luchando a su lado.
El domingo 12, a partir de las 18 h empezará la manifestación, con la que se vaciará la plaza y se llevarán las acciones a los barrios hasta el día 15 de mayo. Las reivindicaciones que se planteaban el año pasado son las que ahora vuelven a ponerse sobre la mesa son: “Ni un euro más para rescatar a los bancos”; “Educación, sanidad y servicios de financiación y gestión públicas, universales y de calidad”; “Reparto justo del trabajo y distribución de la riqueza para construir otro modelo productivo sostenible sin pobreza ni precarización”; “Derecho garantizado para acceder a la vivienda digna, derogación de una legislación hipotecaria abusiva”; “Renta Básica universal para todas las personas” y “Democracia, transparencia, devolución del poder político a los ciudadanos mediante un proceso constituyente”.
También se incorporaran algunas novedades, como hablar de la expropiación de viviendas vacías en manos de los bancos, porque “si lo están planteando hasta algunos gobiernos, nosotros no vamos a ser menos”, dice una activista, o la reivindicación de una banca ética. Una de las prioridades de los organizadores este año es mostrar las victorias conseguidas, y lo hacen a través de un mapa y un hashtag de #Logros15M, unos logros que esperán seguir aumentando año tras año “sin siglas ni banderas, al margen de partidos, sindicatos y cualquier forma de representación”, añade el Comité Disperso.