El expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont, en libertad provisional en Bélgica, ha advertido desde Bruselas este martes de que el Estado “nunca convencerá” a los ciudadanos catalanes para que renuncien al derecho a la autodeterminación aunque “imponga su fuerza”. Puigdemont ha trazado un hilo histórico entre la situación actual con la de hace 300 años: “De Felipe V a Felipe VI la ausencia de libertad y la anulación del autogobierno ha sido lo más frecuente en Catalunya”.
Puigdemont y los cuatro consellers cesados por el 155 que permanecen en Bruselas han acudido al acto que las asociaciones de alcaldes independentistas han celebrado este martes en la capital belga para reclamar la libertad de los exconsellers encarcelados en España.
El evento se ha convertido en el primer mitin del expresident de cara a la campaña electoral del 21 de diciembre, comicios a los que Puigdemont quiere presentarse liderando una lista única independentista, aunque ERC se resiste a concurrir a los comicios con el PDeCAT. Puigdemont ha agradecido el apoyo de los alcaldes. “Nos va muy bien sentir vuestro afecto y vuestra presencia aquí”, ha dicho.
En el plano más político, el expresident se ha dirigido al Estado y a los líderes de las instituciones comunitarias, Jean–Claude Junker y Donald Tusk, a los que ha apelado a “respetar” los resultados del 21D si ganan los independentistas.
“¿Señor Juncker, señor Tusk, es esta la Europa que quieren? ¿Una Europa con un gobierno encarcelado y con un país sin derecho a tener a sus representantes escogidos democráticamente?”, ha aseverado Puigdemont, que ha preguntado a ambos dirigentes si “continuarán ayudando al golpe de Estado de Rajoy” en caso de victoria independentista el 21D.
También han tomado la palabra los exconsellers que están en Bruselas junto a Puigdemont, todos ellos pendientes de que la Justicia belga decida el próximo 17 de noviembre sobre la orden de arresto y entrega emitida por la jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela.
La más contundente ha sido la extitular de Enseñanza, Clara Ponsatí, que se ha dirigido directamente a los líderes europeos Angela Merkel, Emmanuel Macron, Donald Tusk y Jean–Claude Juncker. “¡Cuánto mas miren hacia otro lado, más están colaborando en este abuso autoritario! Cuando se encarcelan los oponentes políticos ya no hay democracia”, ha lanzado.
Con todo, el acto ha permitido comprobar, una vez más, que el soberanismo no tiene especiales apoyos en Bruselas: al evento no ha acudido ninguna autoridad de la Comisión Europea, que ha avalado las distintas decisiones del Estado para hacer frente al proceso soberanista, como la aplicación del 155 por parte del Gobierno o el encarcelamiento de ocho exconsellers decretado por la Audiencia Nacional. La única excepción fue la condena de la Comisión de las cargas policiales del 1-O.
La conferencia de los alcaldes sí ha contado con la presencia de algunos diputados más afines al soberanismo, como el eurodiputado del Sinn Féin, Matt Cart; o el independentista belga Mark Demesmaeker, de la Alianza Neo-Flamenca.
El acto, organizado por la Associació Catalana de Municipis (ACM) y la Associació de Municipis per la Independència (AMI), ha arrancado con la intervención de los eurodiputados de ERC Josep Maria Terricabras y Jordi Soler, que han cargado contra el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, por su papel en la crisis catalana.
Han asegurado que Juncker “se está equivocando” porque, han sostenido, el conflicto entre la Generalitat y el Gobierno “no es un asunto interno”, la posición que las instituciones comunitarias defienden cuando se les pregunta sobre la cuestión catalana.
“Pedimos a Europa que abra los ojos. Ayude a Catalunya, por favor”, ha reclamado la presidenta de la Associació de Municipis per Independència (AMI) y alcaldesa de Vilanova y la Geltrú, Neus Lloveras (PDeCAT), mensaje en el que ha abundado la alcaldesa de Girona, Marta Madrenas (PDeCAT): “La intervención europea es urgente para frenar la represión del Estado a los ciudadanos y los cargos electos catalanes”.
Por su lado, el alcalde de Sabadell, Maties Serracant (Crida per Sabadell, candidatura participada por la CUP), ha querido mostrar el apoyo de los alcaldes al “gobierno legítimo de Catalunya salido de las urnas”, y ha criticado al PP “por querer dirigir Catalunya”. “Pero ya no somos una colonia”, ha zanjado.